JHS amplía la serie Legends Of Fuzz clonando otros 3 pedales de fuzz de los años 60 y 70

Josh Scott continua con su labor de recreación de antiguos circuitos de fuzz que ya inició en 2020 con la serie Legends Of Fuzz, y esta vez nos trae 3 pedales que resucitan otros tantos fuzz de los 60 y 70. Siempre con un toque pedagógico proporcionando datos interesantes sobre la historia de cada uno de estos efectos.

Los nuevos Berkeley, Mary-K y Plugin conservan el formato en cuña, los dos potenciómetros en la parte trasera, y un conmutador de Mod en un lateral que tenían los anteriores pedales de esta serie, y en esta ocasión además ha acompañado el lanzamiento con el Volture, un pedal/accesorio que permite simular el comportamiento de una pila gastada.

Este pedal es una réplica del Fresh Fuzz de la compañía Seamoon Inc. fundada en 1973 por Craig Anderton y John Lang. Un pedal que ganó notoriedad tras ser usado por guitarristas como Tom Scholz (Boston) o Eric Johnson. Esta recreación esta basada en la primera versión del Fresh Fuzz con un único operacional 741

Este circuito está basado en el Kay Fuzz Tone de finales de los 60 que se comercializó como una alternativa económica del Shin-ei/Univox Superfuzz. Una unidad que formaba parte de una serie de efectos en formato pedal con un único parámetro ajustable con el pie. En esta recreación, JHS ha añadido mandos de Volume y Frequency, además de un conector para pedal de expresión externo por si queremos usarlo como fue concebido originalmente. 

Este fuzz recrea el circuito del Boss Tone de 1966. Un efecto en formato de petaca con jack incorporado para conectarse directamente a la guitarra, que fue diseñado por Jordan Electronics, una compañía especializada en equipo nuclear que un buen día decidió fabricar también amplificadores de guitarra y pedales. 
Este clon de JHS cuenta con los mismos controles de Volume y Attack del original, pero en un formato de pedal mucho más practico.

Finalmente, la marca ha aprovechado este lanzamiento para añadir el Volture. Un pequeño pedal, que intercalado entre la fuente de alimentación y el fuzz, permite ajustar el voltaje de entrada para recrear el efecto de una pila gastada, y así poder encontrar ese "Sweet Spot" que muchos buscan en un fuzz.

Los 3 pedales Berkeley, Mary-K y Plugin tienen el mismo precio de 179 dólares cada uno, mientras que el Volture cuesta 80 dólares.

 

 

Más información | JHS Pedals