12 reflexiones que calmarán tu GAS (Gear Acquisition Syndrome)
- Tus artistas preferidos no siempre usaron lo mejor
- En el pasado tocaste con un equipo peor (y no se murió nadie)
- Repasa vídeos tuyos del pasado
- Querer versus necesitar
- Observa qué herramientas son las que han resuelto tus necesidades
- Ponte en el lugar del oyente para tomar (algunas) decisiones
- Crea un vínculo con tu equipo
- Haz pequeños ajustes a tu equipo para que sea más versátil
- Entra en el mundo DIY
- Recuerda que lo nuevo también dejará de serlo
- También existe alquilar y tomar prestado
- Lo material no es lo que remedia la ansiedad ni las inseguridades
El GAS: algunos no lo sufren, pero los que lo tenemos, ¡conocemos bien lo duro que es escapar de sus garras! Sabemos lo difícil que es no desear en secreto esa guitarra, o querer vehementemente sustituir nuestro ampli por ese nuevo modelo con tantas palanquitas, o estar ya pensando en reorganizar la pedalera para dar cobijo en ella al nuevo pedal que acabamos de ver en la portada de Guitarristas.info.
No es exclusivo de los guitarristas, ya que el Gear Acquisition Syndrome (síndrome de adquisición de equipo) también afecta a los fotógrafos, los profesionales del vídeo, amantes del airsoft, ciclistas, amantes de la tecnología, coleccionistas y a prácticamente todos los aficionados de cualquier cosa que implique expandir el hobby de muchas y carísimas formas. Pero nosotros podemos ayudar: ofrecemos diversas reflexiones a las que puedes recurrir siempre que veas que pierdes la batalla contra el dichoso GAS. ¡Comencemos!
Tus artistas preferidos no siempre usaron lo mejor
[Índice]En realidad, muchos discos o actuaciones influyentes se realizaron con instrumentos o equipo que tal vez no era demasiado exclusivo. Hoy, la industria de lo “signature” hace que una guitarra idéntica (al menos en lo externo) a la de tu héroe valga miles de euros, pero quizás no es, ni mucho menos, lo que le costó a él la original. De hecho, si somos exactos lo que deberías hacer tú para seguir sus pasos es convertir en leyenda una guitarra que actualmente no esté particularmente cotizada. Una de las que ya tienes, sin ir más lejos.
En el pasado tocaste con un equipo peor (y no se murió nadie)
[Índice]Todos queremos siempre mejorar, y eso es bueno. Por eso practicas todo lo que puedes con tu instrumento, y por eso tratas de hacer que tu guitarra y sus complementos suenen lo mejor posible. Pero si, sencillamente, llega un punto en que no puedes permitirte algo mejor en tu equipo, no te apures: seguro que en el pasado has tenido que tocar con equipos mucho más comprometidos, y eso no te frenó a la hora de hacer disfrutar al público o grabar aquél disco. Si pudiste entonces, ahora también podrás: ya habrá tiempo de renovar material si es necesario.
Repasa vídeos tuyos del pasado
[Índice]¿Realmente sonabas tan mal? Podría sorprenderte desempolvar algunos vídeos y grabaciones antiguas: es posible que encuentres sonidos buenísimos que ni recordabas y te preguntes…¿qué es lo que usé?. Investiga la respuesta: tal vez podrías alucinar dándote cuenta de que era tu viejo ampli a transistores que no consigues vender ni regalándolo.
Querer versus necesitar
[Índice]Lo que es y no es una necesidad es algo subjetivo, claro. No tiene sentido que tratemos de buscar un criterio válido para todas personas, pero sí puede valer la pena diferenciarlo en nosotros mismos. ¿Cuando algo es de necesidad y cuándo, simplemente, nos haría ilusión tenerlo?. No es malo querer comprar cosas que nos ilusionan, sencillamente se trata de ser consciente.
Las cosas necesarias se diferencian en que pueden resolver problemas propios o que causamos a otros de forma indirecta: un pedal afinador para no molestar a otros cuando la cuerda del sol se va a la porra, un soporte de guitarra para no dejarla en el suelo constantemente en los ensayos o incluso una guitarra o ampli que cumpla unos mínimos imprescindibles.
Otras veces ya tenemos todo lo esencial para llevar a cabo la actividad musical pero queremos expandir el disfrute o el concepto musical con un amplificador más elaborado, una guitarra algo más caprichosa o un efecto que nos tiene enamorados.
Observa qué herramientas son las que han resuelto tus necesidades
[Índice]Otro punto relacionado con lo que necesitamos: a veces no somos conscientes de qué partes de nuestro equipo son las que realmente nos sacan de apuros. Cuando hacemos recuento a final de año y contabilizamos qué herramientas hemos utilizado más, no es extraño descubrir que has utilizado tu pedalera multiefectos para muchos más conciertos de los que esperabas. O al revés, tras comprar tu flamante rack de emulación, acabas descubriendo que casi todos los bolos que te han tocado hacer eran de los de “combo apoyado en cuatro cajas de birra”.
O adorar tu Les Paul pero descubrir que siempre acabas tocando con la Strato. Nunca está mal tener una visión objetiva de cuál es nuestra actividad presente, y en qué se diferencia de nuestra actividad pasada o futura. No necesariamente para deshacerte de lo que no uses, pero sí para pensar mejor posibles ataques de GAS futuros.
Ponte en el lugar del oyente para tomar (algunas) decisiones
[Índice]Aunque parezca irónico, no siempre probar las cosas uno mismo nos da toda la información para saber si un equipo nos conviene. Es divertido ir a las tiendas y los conciertos y escuchar buenos y malos sonidos que provienen de otros. Pero aún más divertido es sorprenderse con el equipo del que proceden: a veces ni imaginaríamos como pueden llegar a sonar las guitarras y amplis en manos de otras personas.
Por eso, ser oyente en lugar de intérprete también es una manera de “refrescar” nuestra objetividad. Ayuda a valorar equipos humildes por los que no habrías dado ni un duro, y bajar del pedestal otros mucho más caros que, en contexto, tampoco son tan apabullantes. Es el típico caso en que oímos un sonido de guitarra fantástico saliendo de un local de ensayo y al asomarnos vemos una guitarra y ampli baratos.
Crea un vínculo con tu equipo
[Índice]Seguro que habrás visto artistas famosos que sacan cientos de guitarras diferentes al escenario canción tras canción, mientras que otros parecen estar encadenados a cierta guitarra. A veces es realmente la misma siempre, otras veces tienen muchos modelos parecidos. El caso es que crear un vínculo especial con cierta guitarra es un enfoque diferente al de “arsenal de guitarra para cualquier situación” pero también es válido y puede ser muy reconfortante. Saber que tienes tu guitarra preferida y tratar de usarla siempre que te sea posible no sólo te hará ahorrar en nuevas guitarras, sino que hará que la conozcas más y mejor.
Haz pequeños ajustes a tu equipo para que sea más versátil
[Índice]Es una extensión del párrafo anterior: a veces nos lanzamos a la compra de una nueva guitarra o pedal, y en realidad no necesitamos un cambio tan grande. Hay veces que añadiendo una pequeña modificación a la electrónica de nuestra guitarra, ampli o pedales ya estamos suficientemente cerca de lo que queríamos. Quizás no a la perfección (no deja de ser el mismo equipo), pero muchas veces sorprende la efectividad de pequeños ajustes para no caer tan lejos del “sonido objetivo”. Y ciertamente, es más barato que una guitarra entera nueva.
Entra en el mundo DIY
[Índice]A veces, la sensación de necesitar cosas nuevas puede distraerse creando las tuyas propias. Según a qué nivel lo lleves, el DIY (“Do It Yourself”) también puede acabar siendo caro, pero hay una gran cantidad de proyectos de instrumentos, pedales y amplis que puedes crear tú mismo por un precio razonable y divertirte por el camino. Mejor aún si compartes el pasatiempo con algún conocido.
Recuerda que lo nuevo también dejará de serlo
[Índice]No hay que confundir las el encanto de las cosas nuevas con su utilidad real. La ilusión de una guitarra o un aparato nuevo también se disuelve al cabo de un tiempo, y tener esto en mente puede hacerte menos impulsivo. A cambio, repasa mentalmente los grandes momentos que has vivido con las guitarras que tienes. Eso es algo que una guitarra nueva no puede arrebatarles a las viejas.
También existe alquilar y tomar prestado
[Índice]A veces tenemos piezas de equipo de varios cientos de euros paradas en casa “por si las moscas”. No hay que olvidar que en algunas ocasiones, alquilar o pedir prestados ciertos equipos puede ser una opción más inteligente que almacenar todo el año amplis de repuesto o similares que no usamos la mayor parte del tiempo. Es cierto que el alquiler cuesta un dinero, y que pedir prestado a veces cuesta, especialmente si no somos muy gorrones. Pero muchas situaciones especiales son en realidad casos aislados, que rara vez se van a repetir. Utilizar estas medidas pueden ser la manera de minimizar los gastos y acumular menos equipo inútil en casa.
Lo material no es lo que remedia la ansiedad ni las inseguridades
[Índice]El estrés y la inseguridad también son cosas que pueden agravar tu GAS, ya que a veces proyectamos en los objetos que nos rodean nuestra capacidad para lograr cosas. Muchas personas trasladan sus inseguridades a su ropa, reloj u otros efectos personales (nunca mejor dicho), y aunque te pueda parecer extraño, muchos músicos también hacen algo parecido con sus instrumentos. Estar orgulloso de tu equipo no es malo en su justa medida, pero subir el listón hasta lo inalcanzable porque no conseguimos dejar de sentirnos ansiosos e inseguros, puede ser síntoma de que nuestro problema no tiene tanto que ver con la música sino con algo más complejo: cómo nos sentimos con nosotros mismos.