Guitarra eléctrica, acústica o española ¿cuál compro para aprender?

La que tú quieras. Aunque hay quien opina que unos tipos de guitarra son más difíciles que otros para empezar a tocar, no existe ninguna norma que te obligue a aprender con un instrumento que, en realidad, no te atrae. La motivación es vital para dominar la guitarra así que, si ya tienes claro cuál te gusta, no te lo niegues a ti misma o mismo, y házte con ella.

Dicho esto, vamos a por la respuesta larga. Normalmente, la pregunta que encabeza el artículo nos la solemos hacer cuando no estamos seguros de cuál queremos, cosa que es perfectamente normal. Las dudas más habituales son cómo suena cada uno, cuál es más difícil para empezar a tocar (esto suele preocupar mucho) o cuáles son los precios para conseguir un instrumento razonable. Pero como no queremos que tengas que leer una disertación interminable, ya que lo que quieres es simplemente comprarte una guitarra, vamos a ir al grano.

Resumir el sonidos de tres instrumentos tan desproporcionadamente influyentes es complicado, pero lo vamos a intentar. Cada uno tiene su carácter y es el ideal para ciertos géneros musicales, aunque nadie te impide probar suerte e intentar tocar piezas de acústica con eléctrica, o piezas de eléctrica con española, por ejemplo. Aún así, vamos a conocer en qué terreno se mueven con más comodidad.

La guitarra española es uno de los instrumentos que vemos más frecuentemente en las casas y es, muy posiblemente, el que hayas visto tocar a amigos estando de excursión o campamento. Tiene cuerdas de nylon (aunque verás que tres de ellas tienen un recubrimiento metálico) y suele presentar una pala (es la “cabeza” de la guitarra, donde están los afinadores) de este tipo:

Esta guitarra se usa muy a menudo para rasguear acordes acompañando a la voz en canciones populares. Pero también es la que se usa en clásica y en flamenco, motivo por el que existe más de un tipo de guitarra española. Pero no es algo que te deba preocupar aún, puesto que cualquiera está bien para comenzar. Otro dato: si te gusta la rumba, también es la guitarra idónea. Te vamos a ofrecer tres vídeos, para que escuches lo que se puede llegar a hacer con ella.

La guitarra acústica también es perfecta para acompañar la voz rasgueando canciones conocidas. La diferencia está en que es el instrumento por excelencia de muchos temas del folk, pop y rock estadounidense y británico, por lo que si te gusta ese género, es el que te dará el sonido más cercano. Piensa que cuando muchos otros países adoptaron dichos géneros, incorporaron también la guitarra acústica como herramienta para sus canciones. Por ejemplo, una parte inmensa del pop en español está tocado con guitarra acústica, no con guitarra española.

Aparte de ese, la guitarra acústica tiene muchos otros usos: quizás no la escogeríamos para tocar rumbas o flamenco, pero puedes tocar blues, country, algunos géneros de jazz y la mayoría de los derivados modernos de la música folk. Nuevamente, existen varios tipos de guitarras acústicas, siendo las Dreadnought y las Grand Auditorium dos de las más comunes. Difieren en la forma del cuerpo, tamaño y en el sonido. Aunque tradicionalmente cada una se asocia a ciertos estilos, nuestro consejo es que te decantes por aquella con la que te sientas más cómodo/a. Ya tendrás tiempo de descubrir tus preferencias para tu siguiente guitarra, normalmente algo más cara.

La guitarra eléctrica tiene el aspecto colorista y moderno que todos conocemos, y es la guitarra que se asocia más frecuentemente al Rock, Blues, Jazz, Funk, y al Heavy Metal. También es excelente para cumplir su papel en la música Pop, Country, Reggae, Ska y en muchos más. Dado que existen guitarras eléctricas muy diferentes y se puede combinar con cientos de efectos y técnicas, su sonido es muy camaleónico.

Eso hace difícil descubrir, en un primer momento, qué guitarra eléctrica es la mejor para ti, pero creemos que lo mejor es que determines en primer lugar qué tipo de pastillas necesitas (que vienen a ser unos "micrófonos" que captan el sonido de las cuerdas). Las pastillas simples (También conocidas como single coil o single) dan un sonido más delgado y nítido, no son tan utilizadas para el Hard Rock y el Metal, pero son muy versátiles para los otros géneros (especialmente el pop, country, rock, blues, ska, o funk). Si lo que quieres hacer es Metal, Rock duro o ciertos géneros de Punk, podría ser buena idea plantearse una guitarra de pastilla doble o “humbucker”, aunque también son fantásticas para Pop, Blues o Jazz. En realidad, las pastilas son importantes, pero es el guitarrista quien define el estilo.

En nuestra guía de compra de guitarras eléctricas para principiantes encontrarás una selección actualizada de las más destacadas, así como criterios para elegir la que más te conviene.

En este apartado hay discrepancias, ya que es algo subjetivo. Pero podríamos comenzar diciendo que uno de los puntos donde más se atascan los aprendices es cuando llega el momento de hacer cejillas (técnica consistente en presionar todas las cuerdas con un solo dedo). Lo blando que sea el instrumento será un punto a favor o en contra para que superen ese momento delicado, en que algunos abandonan o se sienten menos motivados. En eso, quizás la guitarra española y la eléctrica salgan algo más airosas que las guitarras acústicas, que cuando son de mala calidad pueden llegar a ser terriblemente duras (sobretodo en el primer traste). Si lo tuyo es la acústica y ya te habías decidido, no temas, unas cuerdas algo más finas y algún que otro ajuste pueden suavizar el problema. Eso, y práctica diaria, deberían situarte más cerca del éxito.

Otro punto importante, especialmente para niños o jóvenes, es el tamaño de las guitarras: existen versiones reducidas, especialmente de las guitarras españolas (es un instrumento muy popular en la enseñanza infantil). Pero también existen guitarras eléctricas para niños y jóvenes y acústicas (aunque algo más difíciles de encontrar). Para una mano de dimensiones reducidas como la de ellos, es una muy buena opción.

Dejando el tema de la dureza y dimensiones de la guitarra, los conocimientos teóricos que hay que adquirir para cada una de ellas son muy similares, y en cuanto a dificultad, no hay una más difícil que las demás. Todas pueden llegar a ser complicadas si quieres llevar esto muy lejos, pero adquirir un nivel básico que te permita disfrutar es algo asequible en los tres tipos de guitarra.

En este momento los precios de gama “entry level” (es así como le llaman a los productos para empezar a aprender) está bastante igualado en los tres tipos de guitarra. Cuando hablamos de guitarras caras, el tema ya comienza a dispersarse en precios. Pero a estos niveles, cualquiera de las tres guitarras te costará más o menos lo mismo; el problema más bien radica en que la guitarra eléctrica necesita algo para ser amplificada. Un amplificador, un dispositivo para tocar con auriculares, o un interfaz para conectar tu guitarra tu ordenador o tablet serán necesarios, y deberás considerarlos en tu presupuesto, así como un cable para conectarlos. Afortunadamente, hay alternativas económicas en ese terreno.

Volviendo a la guitarra, aconsejar un precio ideal es algo difícil, ya que lo que gasta cada uno es algo muy personal. Pero para dar una orientación, si es tu primera guitarra, ningún profesor de guitarra se escandalizaría porque hayas gastado entre 100 y 200 euros, siendo este tramo de precios el más habitual. Si estás bastante convencida o convencido, y llegas hasta los 300-400 euros, tampoco es descabellado. Precios por encima de ese son algo menos frecuentes en una primera guitarra, pero no hay normas: tú decides lo que gastas.