Blackstar Dept. 10, nuevos pedales a válvulas para grabar directamente a tu ordenador

Aunque algún medio ha empleado algún titular del estilo "Blackstar se adentra en el mundo de los pedales valvulares", lo cierto es que los que conozcan esta marca sabrán que, precisamente, uno de los primeros y más distintivos productos de Blackstar fueron los pedales a válvulas de la serie HT. Una exitosa colección de pedales de saturación (incluso de efectos) que ahora parece que ya tienen relevo: los nuevos Blackstar Dept.10 podrían ser un buen resumen de las funciones más importantes de los pedales HT y añaden algunas prestaciones que tienen muy buena pinta.

Hay tres nuevos pedales, el Dep.10 Boost es un boost (como su nombre indica) con controles muy sencillos (graves, agudos y boost) que no tiene ninguna prestación adicional. Es simplemente para darle más ganancia y calor a un ampli y previo, sea de válvulas o no, pero no cuenta con las funciones de grabación USB ni la emulación de altavoces.

En cambio, los Dept.10 Dual Drive y el Dept-10 Dual Distortion ya son un concepto mucho más integral, que viene a ser la suma de un pedal de dos canales a válvulas y una interfaz de audio digital con emulación de altavoces ajustable mediante un software. En Dual Drive, tenemos dos canales de ganancia más clásica, el primero de los cuales puede ejercer como limpio o crunch cambiando un selector. El segundo canal también ofrece un selector, para alternar entre Crunch y Overdrive. Básicamente, ello nos permite estructurar las cantidades de ganancia para adecuarlas a nuestra música. La ganancia y volumen es independiente para cada canal, mientras que la ecualización es común.

En el Dual Distortion, la idea es la misma, pero el segundo canal ofrece la selección OD1/OD2 en vez de Crunch/OD. En otras palabras,es la versión de alta ganancia del mismo concepto, presentando los mismos controles y mismo panel de conexiones.

Sin duda la innovación respecto a la serie HT es la integración de las bondades del mundo digital en el producto: gracias a ello tenemos salida USB que nos permite utilizar el pedal para grabación directa, aunque leyendo el manual no acabamos de ver claro si es solo una interfaz de entrada o también de salida (ya que nos indican que la salida Cab Rig del pedal puede aceptar "unos auriculares estéreo para práctica silenciosa"). En todo caso, si solo es una interfaz de entrada ya es razonablemente práctico.

Otra ventaja de la conexión USB es que nos permite utilizar un software para editar el tipo de respuesta de la emulación de altavoz digital que sale por la conexión Cab Rig (y obviamente también afecta a la salida de grabación USB). Con él, podemos elegir entre diferentes tipos de pantalla y micro, incluso de etapa de potencia con control de resonancia y presencia y estilo de sala.

En cuanto a la salida XLR, nos facilita la vida a la hora de conectarnos a línea, y también aprovecha las cualidades sonoras de la emulación de pantalla digital. Hay que aclarar que, gracias a la sabia inclusión de un loop de efectos, podemos poner efectos de delay, modulación, armonía o reverb en el lugar óptimo de la cadena de efectos sin por ello perder la salida DI XLR.

La válvula que emplean es una ECC83, y los tres pedales funcionan a 9V (la intensidad indicada en el chasis es de unos 500 mA en los tres pedales), y aunque internamente trabajan a tensiones similares a las de un amplificador (esto ha sido el sello distintivo de los pedales valvulares de Blackstar desde la serie HT). Otra cualidad distintiva ya desde hace años es el control ISF (Infinite Shape Feature), que nos permite ir gradualmente variando desde un estilo de ecualización británica a una americana, y obtener algo más de flexibilidad. El precio está entorno a los 220 dólares para el boost y 299 para los pedales duales.

Todo bastante atractivo considerando lo que incluyen y las alternativas de pedales a válvulas, aunque, ¿habrá algún modo de cambiar de canal de forma remota? Siempre fue lo que echamos en falta de la serie HT original, y parece que seguimos sin ello, y no tiene pinta de que el Midi-over-USB en este caso vaya a salvarnos.

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