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Behringer VT999 (2008)

Precio en tiendas

Opiniones de usuario (2)

  • Fran González
    5
    Opinión de Fran González el 06/03/2021

    Lo mejor: Overdrive / Distorsión bastante orgánica, la puerta de ruido funciona muy bien, muy versátil.

    Lo peor: Quizás que tenga potes de plástico.

    Datos de la unidad comentada | Año de fabricación: 2020 | Precio pagado: 50 € (nuevo)
    Un gran pedal que no se si llamarlo distorsión, overdrive, crunch, o lo que sea que es. La cosa es que tiene bastante ganancia y es muy versátil, además el uso de la válvula le da un sonido bastante más orgánico que el resto de pedales que tengo a transistores. Con el toco desde solillos tipo blues con un overdrive suave hasta metal clásico, para más se queda corto. Fue mi primer pedal y a día de hoy tengo bastantes mas, aun así nunca lo quito de la pedalera. Me mola!
  • Miguelanxo
    5
    Opinión de Miguelanxo el 09/12/2019

    Lo mejor: Sonido; puerta de ruido; controles; solidez.

    Lo peor: Por decir algo: «válvula fría»; «pulsador».

    Un pedal muy majo de Behringer, casa especializada en ofrecer cacharros de excelente relación calidad/precio haciendo accesibles a todos los bolsillos aparatos de sonido semiprofesionales y profesionales.

    Fundamentalmente es un pedal de distorsión que al tiempo funciona como etapa previa valvular. Tiene un limpio enriquecido por su válvula que va creciendo en ganancia adquiriendo timbres de crunch y overdrive hasta llegar a distorsiones que pueden ser salvajes, dependiendo de la válvula que se le coloque, pues es muy sensible a ello.

    Viene de fábrica con una válvula 12ax7, que muchos prefieren sustituir por 12au7 u otras compatibles para adaptar el pedal a su sonido, pues el rango del potenciómetro de ganancia realmente responde sensiblemente al tipo de bulbo que tenga (de instalación sencilla desmontando el fondo).

    También responden con mucha sensibilidad los tres controles de tono (graves, medios, agudos), de buen tamaño, lo que permite configurar cómodamente el sonido al gusto. Lo mismo que de los controles de ganancia y tono cabe decir del de volumen.

    Una vez conectado, se activa el efecto de ganancia con un interruptor de encendido «Power on/off»; «True bypass hardwired».

    Además puede activarse opcionalmente una puerta de ruido con control de humbral que resulta un complemento utilísimo para este pedal. Es el punto con el que llega al 10.

    El pulsador responde bien, pero es delicado al no ser mecánico, por lo que tampoco se siente nítidamente un «clic» al activarlo con el pie (al parecer, no es propiamente un interruptor, sino un activador de circuito; muchos otros pedales los llevan así).

    Lleva sendos LED de diferentes colores (los antiguos, rojo y azul; los más modernos, rojo y naranja, debido a que los usuarios se quejaban de la excesiva potencia del azul): el rojo señala cuando el pedal está encendido y el otro indica si el efecto está activado.

    Hay que advertir que el circuito es de los conocidos como de «válvula fría». Por ello no verás al tubo ponerse totalmente al rojo a través de la rejilla, aunque sí verás que se enciende y se nota en el sonidazo potente pero harmónico y empastado. Esto también hay quien lo modifica sustituyendo la alimentación por una de mayor voltaje.

    La construcción es metálica y sólida; también en el fondo. Planta de gran tamaño (aproximadamente el doble que un pedal estándar) aunque de bajo alzado. Consecuentemente, el interior es muy amplio, lo que permite que muchos le hayan implementado modificaciones que circulan por internet con notable éxito (incluso se le puede instalar una segunda válvula, por lo visto). Por ello tampoco se calienta, además de que tiene una rejilla de ventilación superior en la zona de la válvula.

    El aspecto externo varía en pequeños detalles entre las primeras versiones y las actuales (como vimos ocurría con un LED, pero apenas se trata del diseño y tamaño del logo de Behringer), pero manteniendo siempre, como en otros pedales de la serie «Vintage» del mismo fabricante, un toque de estética retro.

    En suma, un excelente pedal con un extenso rango de sonidos configurables mediante sus controles de ganancia, frecuencias y volumen, redondeado por una válvula de vacío y una puerta de ruido.

    No puede pedirse nada mejor por el precio.