Lo mejor: excelente relación precio, buen sonido, salida digital
Lo peor: mini display numérico para visualizar todos lo parámetros
Datos de la unidad comentada
| Año de fabricación: 2004 | Precio pagado: 70 € (usado)
Para mí el Zoom RFX-2200 fue una grata sorpresa. Lo compré muy barato, en principio básicamente para percusión y bajos ya que su sección de efectos MIXDOWN tenía ajustes interesantes con compresores y ecualizadores que iba a realzar esa sección en mi setup y francamente no les presté demasiada atención al resto de efectos que ya tenía cubiertos con otros equipos.
Con el tiempo topé con una artículo muy interesante que hablaba de lo muy infravalorado que siempre había estado este rack y que sus reverbs, delays, chorus, flanger, phaser y otros efectos, debidamente ajustados, podían dar mucho de sí y con una excelente calidad de sonido, así que me propuse experimentar a fondo con ellos.
Desde reverbs infinitas, delays multidimensionados panorámicos, phaser con ondulaciones sutiles y muchos otros efectos más agresivos y experimentales debo decir que sinceramente me sorprendió su rendimiento. No es cuestión de compararlo con otros racks multiefectos, seguro que juegan en otra liga, pero no me cabe ninguna duda de que esos 70€ (con envío incluído) que me costó han cundido mucho más de lo esperado.
Además dispone de salida digital (óptica y spdif) que es un plus a tener en cuenta. La única pega sería el display de tan sólo dos caracteres para visualizar todos lo parámetros y configuraciones, pero una vez le pillas el tranquillo compruebas que no te hace falta mucho más, además por ese precio no creo que se le pueda pedir más.
Dispone de 100 presets de origen que no es que sean de lo mejor, pero toqueteando y ajustándolos al gusto de cada uno la cosa cambia y compruebas que pueden ser muy usables y atractivos. La otra posible pega es que no hay un banco específico para los presets de usuario, es decir, se pueden editar y crear nuevos presets pero para grabarlos hay que sobreescribir sobre los presets originales aunque se pueden volver a recuperar todos esos presets originales haciendo un reset de fábrica.
Otra cosa muy interesante y que viene a colación con el tema de los presets es que permite hacer volcados sysex (yo siempre uso Midi-OX), tanto de todo el banco como individualmente de cada preset, lo cual es muy útil para generar una verdadera biblioteca de efectos y rescatarlos de forma unitaria en el momento y lugar que se quiera. Otros rack de efectos como por ejemplo mi TC Electronic M-One-XL, no tienen esta facultad, pueden volcar todos los presets juntos en un único archivo sysex pero no los presets de forma individual.
Para finalizar creo que es obligado comentar que el manual en español está muy bien, con todos los parámetros de cada efecto perfectamente detallados y que permiten navegar y probar sabiendo lo que se está haciendo en cada momento, cosa que en otros equipos y debido a su parco y críptico manual muchas veces no es así y uno va más por intuición y usando el típico prueba y error.
Conclusión, un excelente rack con una inmejorable relación calidad precio, mucho más útil de lo que en principio cabía esperar.
por Toni 
Lo mejor: excelente relación precio, buen sonido, salida digital
Lo peor: mini display numérico para visualizar todos lo parámetros
Con el tiempo topé con una artículo muy interesante que hablaba de lo muy infravalorado que siempre había estado este rack y que sus reverbs, delays, chorus, flanger, phaser y otros efectos, debidamente ajustados, podían dar mucho de sí y con una excelente calidad de sonido, así que me propuse experimentar a fondo con ellos.
Desde reverbs infinitas, delays multidimensionados panorámicos, phaser con ondulaciones sutiles y muchos otros efectos más agresivos y experimentales debo decir que sinceramente me sorprendió su rendimiento. No es cuestión de compararlo con otros racks multiefectos, seguro que juegan en otra liga, pero no me cabe ninguna duda de que esos 70€ (con envío incluído) que me costó han cundido mucho más de lo esperado.
Además dispone de salida digital (óptica y spdif) que es un plus a tener en cuenta. La única pega sería el display de tan sólo dos caracteres para visualizar todos lo parámetros y configuraciones, pero una vez le pillas el tranquillo compruebas que no te hace falta mucho más, además por ese precio no creo que se le pueda pedir más.
Dispone de 100 presets de origen que no es que sean de lo mejor, pero toqueteando y ajustándolos al gusto de cada uno la cosa cambia y compruebas que pueden ser muy usables y atractivos. La otra posible pega es que no hay un banco específico para los presets de usuario, es decir, se pueden editar y crear nuevos presets pero para grabarlos hay que sobreescribir sobre los presets originales aunque se pueden volver a recuperar todos esos presets originales haciendo un reset de fábrica.
Otra cosa muy interesante y que viene a colación con el tema de los presets es que permite hacer volcados sysex (yo siempre uso Midi-OX), tanto de todo el banco como individualmente de cada preset, lo cual es muy útil para generar una verdadera biblioteca de efectos y rescatarlos de forma unitaria en el momento y lugar que se quiera. Otros rack de efectos como por ejemplo mi TC Electronic M-One-XL, no tienen esta facultad, pueden volcar todos los presets juntos en un único archivo sysex pero no los presets de forma individual.
Para finalizar creo que es obligado comentar que el manual en español está muy bien, con todos los parámetros de cada efecto perfectamente detallados y que permiten navegar y probar sabiendo lo que se está haciendo en cada momento, cosa que en otros equipos y debido a su parco y críptico manual muchas veces no es así y uno va más por intuición y usando el típico prueba y error.
Conclusión, un excelente rack con una inmejorable relación calidad precio, mucho más útil de lo que en principio cabía esperar.