Cómo diferenciar una falsa Fender Stratocaster

Las colonias, los bolsos, la ropa: son sectores en los que, desgraciadamente, es habitual que las falsificaciones se vendan como originales de forma ilegal. El mundo de las guitarras eléctricas no es una excepción, y marcas como Fender y Gibson tienen catálogos tan extensos, con tantas variantes, y desde hace tantos años, que a veces es muy complicado estar seguro de si lo que tenemos ante nosotros es o no una de sus guitarras. Por supuesto, los verdaderos amantes de las citadas marcas, acumulan gradualmente un enorme conocimiento sobre detalles estéticos, datos históricos y otras pistas que ayudan a diferenciar los instrumentos auténticos.

El guitarrista Kennis Russell, un estadounidense dedicado a la creación de backing tracks, demostraciones de material y reviews en Youtube, ha decidido aportar algo de ayuda con un vídeo en el que cita algunas de las muchas posibles formas de identificar una copia de la Fender Stratocaster. Primero, Kennis clasifica las copias en dos tipos: modificaciones de modelos muy cercanos, como los de Squier, o bien guitarras manufacturadas originalmente con la idea de ser copias. De las segundas destaca que es algo más complicado llegar a una conclusión clara.

Comienza el vídeo mostrándonos una Squier, cuyo logo ha sido borrado y sustituido por un decal de Fender. Esta sustitución es detectable gracias al borde claramente visible que presenta el decal. Algunas Fender originales también presentan un decal con un borde exterior, sin embargo Kennis señala que la diferencia de calidad del logo adherido es la suficiente como para ser percibida.

También el puente es diferente en la copia que en las Stratocasters que se presentan en el vídeo, tanto en la calidad de los metales empleados como su aspecto exterior. También el diseño es claramente diferenciable.

Según Kennis, en los modelos de Fender es esperable que haya una cierta suavidad al pasar los dedos por los laterales del mástil, gracias al trabajo de perfeccionamiento de los mismos. Si los trastes presentan perfiles toscos, es otro punto más a favor de que podríamos tener delante una copia.

Otro punto que, sumado a otros, nos puede ayudar a desempatar una situación dudosa es la calidad de la cejuela. En general, la calidad del material al compararlo debería ser superior en una Fender auténtica.

Las Fender americanas tienen un recubrimiento de nogal entorno a la apertura para el alma. Algunos modelos Squier y Made in México presentan dicho recubrimiento en plástico, pero puede seguir siendo un buen indicador para diferenciar supuestas American Stratocasters. Por último, si no hay recubrimiento de ninguna clase, Kennis asegura, en un 100%, que no es una Fender.

Todas las Squier tienen dos tensores. Que una Fender tenga dos tensores no la señala como una copia, ya que, aunque algunas Fender USA solo tienen uno, muchas tienen dos. Lo que Kennis trata de aclarar es que si sólo presenta un tensor, al menos sabemos que no es una Squier modificada. Pero no nos asegura que no sea una copia de otra clase.

Una ubicación incorrecta de una pieza, como la de un tensor que incluso tapa parcialmente el logo (como el que aparece en el vídeo) es algo que también nos debe hacer sospechar.

Los afinadores en las Fenders americanas o bien presentarán alguna clase de logo de fender, o serán del tipo vintage (ver foto). Sin embargo, no encontraremos en una Fender americana afinadores Squier (en persona son fácilmente detectables, pero en casos de compra a distancia, pueden quedar poco expuestos en las fotos) o afinadores no vintage sin logo de Fender.

Una de las formas más obvias de obtener información de la guitarra es comprobar si existe su número de serie, que habitualmente se encuentra en la pala, ya sea en la parte anterior como en la parte trasera.

No es común que tengamos la ocasión de llegar a este nivel de profundidad antes de comprarla, pero al retirar el golpeador y ver los componentes interiores, podríamos valorar su limpieza en la instalación y el tipo de piezas escogidas. También la suavidad en el manejo del selector de pastillas y la respuesta uniforme de los controles de volumen y tono también son factores que añaden motivos para sospechar.

Como conclusión a todo ello, Kennis nos dice que hay pocos rasgos que, por sí solos, delaten las copias con total seguridad. Lo importante es conocerlos bien, ya que la presencia de varios de ellos comienza a ser demasiada coincidencia. Por supuesto, esta lista es solo un punto de partida para todas las posibles aportaciones de datos documentados que conozcáis en relación al tema.

Más información | Kennis Russell