Dada la media de edad de los usuarios de Guitarristas, sabemos que la respuesta inmediata de muchos, sin necesidad de pensarlo, será probablemente un sí rotundo a la pregunta del título. Han vivido una parte del auge de los grupos de música. Pero si la planteamos, es por una experiencia reciente nos animó a escribir unas líneas sobre algo que, segurísimo, no se os habrá pasado desapercibido.
Hace poco, preparando un contenido de nuestra web hermana, Hispasonic, visitábamos a un productor de mucha importancia en la escena musical nacional. Aunque ha trabajado con muchos tipos de música, se le suele asociar con las bandas de indie actuales más importantes de nuestro país, con las que ha logrado discos de oro, nominaciones a Grammys y otros méritos más que considerables.
Por lo tanto, teníamos delante a una persona que reúne varias características interesantes: una es que trabaja con artistas que llenan estadios y salas grandes, pero no por ello son artistas de trap, reggaeton o música esencialmente electrónica. Siguen siendo grupos en el sentido tradicional, con batería, guitarras y bajo, que ensayan y graban. Además, sus miembros suelen ser fijos, y no músicos de sesión que vienen y van, por lo que hay un cierto vínculo personal — en principio — con las piezas compuestas.
Es algo cada vez menos frecuente en realidad: entre los artistas más populares del mainstream, la gran mayoría son solistas. Por eso, no nos extrañó del todo cuando, en mitad de la charla — muy agradable por cierto — con este productor, pronunció las palabras "cada vez, la gente hace menos grupos de música".
¿Tiene razón? Creemos que sí, tiene que tenerla. Sería lo lógico, porque ahora es más fácil que nunca hacer música sin la ayuda de nadie más. Y aunque ese es un buen argumento, en realidad nos parece que no lo dijo por eso. Nos dio más la sensación de que simplemente relataba lo que él ve gracias a su profesión, su percepción de una realidad que ya está ocurriendo, y con la que también coinciden algunos empleados de locales de ensayos por horas — excelentes jueces para opinar sobre el tema.
El productor incluso mencionó que para los intermediarios (discográfica, management, incluso abogados) suele ser más atractivo un artista solista, ya que la relación comercial se vuelve más simple para ellos que cuando hay varias personas implicadas. No se le veía demasiado a gusto admitiéndolo, él se define como "un romántico" y se nota que ama la magia de un grupo de música con mentes bien coordinadas con las que poder trabajar tras la mesa de mezclas.
Los referentes musicales mainstream actuales
[Índice]En el pasado, parecía haber un equilibrio entre grupos y solistas dentro de los referentes musicales: The Beatles, Rolling Stones, The Police, Queen, U2, Fleetwood Mac, R.E.M., Nirvana, Guns N' Roses son grupos, y Elvis Presley, Madonna, Prince, Elton John, Bruce Springsteen y David Bowie son solistas. Parecía existir una buena cantidad en ambos lados de la balanza del mainstream, produciendo cantidades de dinero enormes a sus sellos discográficos.
Es difícil hacer una valoración justa de si ese equilibrio sigue existiendo, pero si nos dáis permiso para hacerlo un poco a ojo, diríamos que ahora hay pocos grupos de nueva generación que sean tan admirados como Rosalía, Bad Bunny, JBalvin, Justin Bieber, Bruno Mars, Rauw Alejandro, Shakira. Muchos de ellos llevan montones de gente en el escenario, claro, pero son músicos de sesión.
Pero para que os hagáis a la idea, en el momento en que hemos redactado este artículo, hemos hecho una captura de pantalla de la página frontal de los 40 principales. De los nombres que aparecen, solo The Chainsmokers y Gente de Zona se refieren a más de un individuo (el primero son dos DJ/productores, el segundo, dos vocalistas de música latina).
El poder hacer música sin ayuda de nadie
[Índice]Cualquier chica o chico actual puede estar haciendo música en su casa en cuestión de minutos. No tiene más que descargarse un par de programas gratuitos en el móvil y, si no sabe cómo hacer algo, buscar un tutorial en Youtube para resolver sus dudas. Si nos apuráis, puede encontrar algún problema para grabar bien su voz, aunque tras la compra de un micro USB se acabaron las excusas. Si quiere, puede hacerlo. Y no ha necesitado a nadie: lo ha hecho a solas, y comparte el resultado con cientos de personas en internet en TikTok o Instagram.
Traslademos eso al año 1980. Ya había gente con ordenadores en casa en España — poca —, pero a nivel musical, tampoco era demasiado lo que podía hacerse con ellos. No había Cubase, ni Logic, ni WAV, ni MP3, nada de eso que ahora manejamos alegremente existía. Y aunque lograras programar algunos sonidos internos (en absoluto grabar), los tiempos de carga eran infernales.
Definitivamente, eran posibilidades que solo usaban algunos amantes de la informática y creadores de videojuegos; el que simplemente buscaba hacer música, tenía otro método mucho más rápido: agarrar una guitarra. Y si tu referente era, pongamos por caso, Aerosmith, pues lo siguiente que hacías era buscar en tu ciudad alguien que tocara la batería, un cantante, convencías a tu amigo de que se hiciese bajista y buscabas un sitio donde meterse a ensayar. Es algo lógico.
¿Es importante el estilo musical?
[Índice]La música electrónica tiene tradicion de ser más solitaria. No son raros los dúos como Daft Punk o los mencionados Chainsmokers, pero casi nunca suelen ser 7 personas en el escenario. Por lo tanto, sí existe una cierta costumbre de que géneros más "artesanales" estén hechos por varias personas. Pero si nos guiamos únicamente por lo que es factible, hoy en día hasta podemos hacer un blues sin la ayuda de nadie. Si nos empeñamos, podemos emular la batería en el ordenador y hasta el bajo. Y hasta la guitarra, casi. ¿Nos gustará tanto como uno hecho "a mano"? Suponemos que no, pero poderse, sí se puede.
Tocar con más gente es divertido
[Índice]Esto es lo que creemos que no ha cambiado, ni cambiará nunca. Aunque la gente joven no necesite reunirse para hacer música, cuando lo hacen seguramente es porque estar con más gente de tu edad y retroalimentarse con las ideas de unos y de otros es muy estimulante y natural. Pocas veces se aprende tanto de música como cuando te topas con alguien con talento y tienes la suerte de poder hacer música con él. También es mas llevadero practicar con más personas, y no se percibe tanta presión como estando a solas con un profesor. Y mucho más divertido cuando te enfrentas a dificultades del mundo real, como tus primeros conciertos o problemas para conseguir el dinero que necesitáis para el proyecto musical.
Los hábitos actuales
[Índice]Luego hay una cuestión tangencial, pero que también puede influir, que es la de los hábitos normales en 2022. Antes uno se pasaba la mañana fuera yendo primero a hacer un trámite al banco, luego a comprar unas cuerdas de guitarra, luego a la copistería a hacer unas fotocopias, y luego al todo a 100 a comprar un par de libretas, por ejemplo.
Todas esas cosas las hacemos hoy en menos de 15 minutos con el móvil en la mano: sea lo que sea que queramos fotocopiar lo podemos escanear con el móvil (o hasta ya está internet subido por alguien), y lo demás nos lo entregan todo en casa, y hasta puede que más barato. Hacer música desde casa en un portátil parece un enfoque más afin al único estilo de vida que han conocido nuestros hijos y sobrinos. Un método mas ágil y que requiere menos planificación que los ensayos tradicionales.
Huyamos, es el apocalipsis
[Índice]Sabemos que en este punto, parece que se esté insinuando un "el fin de los grupos de música ha llegado, huyamos", pero no; ni es nuestra intención sugerir eso, ni lo pensamos realmente. Demasiado extremo y alarmista proponerlo. Después de todo, juntarte a hacer música con tu colega del barrio cuando tenéis 16 años y tiempo libre es algo demasiado tentador, y seguirá pasando.
Y seguirá habiendo grupos que, llenen estadios o no, seguirán siendo referentes atractivos. Por no mencionar que se puede volver a poner de moda. Y que tampoco se borra de la faz de la tierra con efecto inmediato todo lo que no sea requetecool, afortunadamente. Hay una gran cantidad de amantes de la música de todo el mundo que con su pasión se encargan de conservarlo todo, desde el barroco hasta el jazz, pasando por el black metal cristiano acústico cantado en bengalí. Así que el futuro de los grupos está a salvo.