Fernandes R8 - The Revival

La Fernandes RST-50 también fue denominada "R8" por los japoneses.

Es una reedición de la stratocaster de 1964 fabricada en Fujigen Gakki (Japón) en el año 1984/85.
La información que voy a plasmar aquí la he conseguido leyendo en varias páginas de internet sobre estas guitarras, por lo que si algún dato de los que manejo en este artículo es erróneo o matizable, agradecería vuestros comentarios. También me ha parecido intuir que la gente confunde la R8 con la R9, siendo guitarras muy parecidas pero de calidad muy distinta. Las dos son “The Revival”, supongo que de ahí viene la confusión.

Cuando llegó esta guitarra y la abrí me encantó el tono amarilleado y el aspecto vintage, yo iba buscando algo así. Una strat con historia, con desgaste.

Nada más recibirla le di un lavado de cara bastante completo, incluyendo limpieza y nutrido del diapasón, limpieza de óxido al hardware , pulido de trastes, limpieza-pulido del mástil y cuerpo y para finalizar un ajuste general.

Características:

Los afinadores:

Originariamente al ser una reedición del 64 eran tipo Kluson, pero que el anterior propietario retiró y le puso unos Gotoh como los que montan las Fender Japan. El motivo es que desgraciadamente el hardware que trae esta guitarra no está a la misma altura que el resto de componentes, este tipo de afinadores daban muchos problemas por lo que para mí fue una mejora, aunque yo le hubiera puesto unos Kluson originales.

Mástil:

Es muy fino y cómodo, fabricado en arce con una veta preciosa, con diapasón de palorrosa de una calidad impresionante en tono rojizo, inlays redondos perlados (históricamente correcto). No tiene ajuste del alma en la pala sino en el zoque y sin nervio en la trasera del mástil, como debe ser en esta reedición. Lacado en nitrocelulosa con matices atigrados y amarilleado por el tiempo. Cejuela de hueso y trastes vintage, muy finos. Pala lawsuit (litigio que obligó fender a cambiar a los fabricantes japoneses) en la cual se puede leer "custom body". Acción de las cuerdas a 2mm sin trasteos.

Detalle de la foto del mástil y la pala:

Cuerpo:

Sin duda alguna las maderas de esta guitarra son lo mejor por la gran calidad que arrojan. El cuerpo está formado por dos piezas de aliso pintado en 3 tonos sunburst y barnizado en nitrocelulosa (Lo de las dos piezas de aliso lo sé por el año y modelo, porque es muy difícil de encontrar la unión)

Fotografía del cuerpo:

Electrónica:

Japón es la mayor potencia mundial en electrónica, pero hay que reconocer que los potenciómetros, selector y demás no son de mala calidad, pero inferiores a los que monta Fender USA. Sobre las pastillas son single-coil cerámicas y no suenan nada mal, aunque son mejorables con unas alnico. Le cambié las tapas de las pastillas amarilleadas por esas negras que me gustaban más.

Puente:

Puente vintage de 6 tornillos, sin duda alguna lo que más me ha decepcionado, ya que me costaba mantener la afinación con solo tocarlo y es por el bloque de malísima calidad que montan. Solamente con cambiar esta pieza metálica mejora bastante, pero he preferido ponerle un wilkinson completo con el que ha quedado perfecta. En las imágenes aparece el puente original antes de ser reemplazado.

La guitarra tiene un feeling tremendo, me encanta. Tengo y he tenido Fender Japan, México, USA Standard, Deluxe, ya que soy un fan de las stratocaster y esta guitarra me ha impresionado por el precio que tiene. A nivel de calidad las ubicaría entre las Fender Japan de los 80 y las USA standard, estando muy cerca de estas últimas, con un cambio de afinadores, puente y pastillas, podría decir que a nivel de una standard actual, acabados y mueble me gusta más la Fernandes que cualquiera de las anteriores. Solamente pondría por encima mi Fender usa Floyd rose classic series.

Tengo 4 strat y para tocar un rato siempre pillo la Fernandes la primera (En mi caso es que me da feeling). Me pasó lo mismo con la Burny les paul y la Gibson les paul Standard, siempre pillaba la Burny, pero bueno esto ya es otra historia.

Saludos y gracias por leerme si habéis llegado hasta aquí.