Walrus Audio Fundamentals Ambient: sonidos shoegaze en un pedal sencillo de usar
Pros
- Excelentes sonidos de reverbs ambientales
- Muy fácil de usar
- De los precios más accesibles dentro de esta marca
- Construcción muy sólida
Contras
- A pesar de ser más económico que otros pedales de la marca, sigue siendo algo exigente en precio
- Podría tener función ramp
La serie de Walrus Audio Fundamentals, aunque no lo parezca, tiene mucha conexión con los pedales Boss. En la época que aún no teníamos internet, comprar un pedal Boss era algo que no había que pensarse mucho: era el efecto estándar que servía a cualquiera, y no había que leer el manual especialmente. Lo conectabas y a tocar. Y no era para principiantes por ello, era un producto transversal que podía quedarse en tu pedalera toda la vida.
Ese es el espíritu que, a mi parecer buscan Walrus Audio con sus Fundamentals. Conscientes de que sus pedales pueden resultar exclusivos y algo rebuscados (además de caros a veces) han querido emular a los que seguro fueron sus héroes en algún momento, Boss (o MXR, EHX y tantos otros) que simplemente ofrecían algo efectivo y fácil de usar, que daba lo que necesitabas sin gastarte una fortuna. Ya pusimos los Walrus Audio Fundamentals a prueba en su momento.
Ahora, llega el nuevo Fundamentals Ambient. Una reverberación con un propósito muy diferente a la ya existente Fundamentals Reverb, que perseguía más bien los sonidos clásicos del pasado: las reverbs de muelles, plate y otras. En cambio este ofrece los sonidos que están de moda en el mundo de la guitarra, los ambientales con reverberaciones casi imposibles. ¿Por qué tienen tanto éxito esos sonidos? Por géneros como el post rock, el shoegaze, pero también por la música worship, o religiosa, que en EEUU goza de una estupenda salud, y se presta mucho a los paisajes sonoros de reverbs celestiales.
¿Cumple lo que promete el Ambient? Es un pedal con la misma construcción excelente que el resto de la serie, y con el mismo planteamiento de simplicidad. Solo tres modos, Deep, Lush y Haze que corresponden, respectivamente, a un sonido con octavación grave, otro con un enorme decay con sensación de crecimiento y un tercero estilo Lo-Fi con cierta saturación. Sonidos ideales para experimentar y crear paisajes sonoros, y elegidos con buen gusto, y aunque pueden — y deben — volver el sonido final verdaderamente turbio y enmarañado, es muy fácil mantenerse en un terreno perfectamente claro y definido sin tener que buscar entre 30 parámetros. Bajar el decay o el Mix nos puede colocar en zona segura si no sabemos lo que estamos haciendo mal.
Pensándolo detenidamente, las reverbs ambientales con frecuencia son pedales para guitarristas con cierta experiencia, y con interfaces de usuario que requieren algo de conocimiento. Aquí podemos resolver cualquier situación con tres faders, y combatir el aburrimiento con los 3 modos disponibles. Por lo tanto, sí es una excelente puerta de entrada a los sonidos shoegaze y post rock para principiantes. ¿Quizás hubiese estado bien una función ramp asociada a su único footswitch? Eso sí, los 145 euros que cuesta aún cuestan un poco en esta parte del sur de Europa; es verdad que los pedales suben sin parar y ya es habitual acercarse a un par de cientos de euros cuando hablamos de pedales nuevos. Pero para las nuevas generaciones, un precio más amable acabaría de convencerles.
