Resulta que esta tarde estaba preparándome un bocadillo de nocilla y el cuchillo se me escapó, yendo a parar a mi dedo índice. El resultado: corte a la altura de la articulación de la segunda falange hasta tocar el hueso, esto implica que tuvo que cortar también la cápsula articular. Y lo que más pillado me dejó, a 1 milímetro escaso del tendón.Por eso creo que debo estar muy agradecido de que dentro de lo que cabe seguramente no tenga repercusiones a largo plazo.
Total, 4 puntos internos y 8 externos.
Ya se que a nadie interesará lo que me pasó, y es normal, nadie me conoce pero quiero haceros ver lo que yo sentí esta tarde, y que es extensible a cualquier ámbito de la vida, y es que somos realmente frágiles y que debemos ser extremadamente cuidadosos con aquello que nos importa.