Os cuento lo que me paso el mes pasado, para que tengáis una idea de cómo van estas cosas y cuando se intenta ganar tiempo y pitorrearse además del daño causado y que no se sabe cómo va a acabar.
Fui a comprarme un traje al corte inglés a finales de noviembre y una vez elegido, al pagar con la propia tarjeta mia del corte, me dice el dependiente que no acepta el pago, posiblemente por exceso de gasto.
Como apenas había comprado nada ese mes, bajo a atención al cliente donde me informan que me he excedido en el gasto, ya que he comprado apenas tres días atrás, dos iPhone 13 libres y dos juegos de auriculares Apple, por un importe total de 3000 lauros. Le digo que si se va del bolo o que, que yo no he comprado nada de eso, que se ha equivocado. Tirando del hilo, me dice que ya se ha entregado uno de los móviles a un tal ….. en Barcelona. Compruebo mi App del corte inglés y efectivamente, me han cambiado los datos, nombre, teléfono y dirección de entrega. Anuló los artículos pendientes de entrega y pongo denuncia en comisaría y reclamación del gobierno de Aragón al corte inglés, por falta de seguridad.
El caso es que el receptor espera en el portal indicado de entrega, como le avisan al móvil que ha indicado de cuando llega el reparto y como el repartidor no comprueba más que el nombre, sin pedir dni, pues ya tiene el móvil y por supuesto ni se llama así ni vive allí. Échale un galgo.
El caso es que me quede con un pufo de 1259 lauros sin comerlo ni beberlo.
Menos mal que no fui el único afectado y cometieron el error de poner la misma dirección de entrega para todos los puros y supongo que no le costaría nada a la poli pillarlo con las manos en la masa.
Se solucionó el asunto con detenciones pues era una banda de sinverguenzas y por supuesto no tengo que pagar el puto móvil.
Pero todas las molestias y tiempo no me las quita nadie.
Os cuento esto porque la sinverguenceria está a la orden del día.
No hay que tener piedad ni consideración con este tipo de gente, ellos no tienen ningún reparo en joderte.
Si tuviera intención de devolver la pasta y teniendo más artículos a la venta, que menos que ofrecer al timado alguno de ellos o varios , al menos que sirvan de garantía hasta el pago.
Vaya tocho que he metido.
Fui a comprarme un traje al corte inglés a finales de noviembre y una vez elegido, al pagar con la propia tarjeta mia del corte, me dice el dependiente que no acepta el pago, posiblemente por exceso de gasto.
Como apenas había comprado nada ese mes, bajo a atención al cliente donde me informan que me he excedido en el gasto, ya que he comprado apenas tres días atrás, dos iPhone 13 libres y dos juegos de auriculares Apple, por un importe total de 3000 lauros. Le digo que si se va del bolo o que, que yo no he comprado nada de eso, que se ha equivocado. Tirando del hilo, me dice que ya se ha entregado uno de los móviles a un tal ….. en Barcelona. Compruebo mi App del corte inglés y efectivamente, me han cambiado los datos, nombre, teléfono y dirección de entrega. Anuló los artículos pendientes de entrega y pongo denuncia en comisaría y reclamación del gobierno de Aragón al corte inglés, por falta de seguridad.
El caso es que el receptor espera en el portal indicado de entrega, como le avisan al móvil que ha indicado de cuando llega el reparto y como el repartidor no comprueba más que el nombre, sin pedir dni, pues ya tiene el móvil y por supuesto ni se llama así ni vive allí. Échale un galgo.
El caso es que me quede con un pufo de 1259 lauros sin comerlo ni beberlo.
Menos mal que no fui el único afectado y cometieron el error de poner la misma dirección de entrega para todos los puros y supongo que no le costaría nada a la poli pillarlo con las manos en la masa.
Se solucionó el asunto con detenciones pues era una banda de sinverguenzas y por supuesto no tengo que pagar el puto móvil.
Pero todas las molestias y tiempo no me las quita nadie.
Os cuento esto porque la sinverguenceria está a la orden del día.
No hay que tener piedad ni consideración con este tipo de gente, ellos no tienen ningún reparo en joderte.
Si tuviera intención de devolver la pasta y teniendo más artículos a la venta, que menos que ofrecer al timado alguno de ellos o varios , al menos que sirvan de garantía hasta el pago.
Vaya tocho que he metido.
