Cuando una obra literaria se pública en internet deja de tener la consideración de inédita y eso la penaliza a la hora de ser presentada a concursos y editoriales. Es por esto, por si un día me siento con ganas de comenzarla a pasearla otra vez por ahí, que me abstengo de publicar las últimas siete páginas. ¿Cómo, el capitulo XVI no es el final? No, no lo es, queda una vuelta de tuerca más. Si alguno de vosotros fieles lectores se siente cabreado conmigo pues... me alegro mucho, porque esto significa que habéis tejido un vinculo con Gordo y por lo tanto conmigo. Niños y niñas, vuestro enfado es el mayor halago que podría recibir.
Oigo por allí al fondo gente que gruñe amenazas entre dientes e insiste: ¿que pasa en las últimas siete páginas? Os diré lo que no pasa:
-Gordo y su vecina se casan.
-El poli malo llama a la puerta de Gordo con un ramo de flores en la mano.
-Púas es elegido presidente vitalicio y plenipotenciario de la SAGE y del gobierno de la Antártida.
-Moe Shislack se liga a Natacha.
-Rafael es elegido presidente de tu comunidad de vecinos y por fin todo el mundo saca la basura a su hora.
-Algo que te esperes.
Pues esto es lo que hay. Tendrás que comprarte el libro cuando lo veas en la librería de la estación o el aeropuerto, ¡que putada! veinte pavos por siete páginas. La ventaja es que le podrás decir a quién te acompañe en el viaje: el autor es amigo mio, un pedazo cabrón, pero definitivamente uno de los nuestros.
Saludos.
Oigo por allí al fondo gente que gruñe amenazas entre dientes e insiste: ¿que pasa en las últimas siete páginas? Os diré lo que no pasa:
-Gordo y su vecina se casan.
-El poli malo llama a la puerta de Gordo con un ramo de flores en la mano.
-Púas es elegido presidente vitalicio y plenipotenciario de la SAGE y del gobierno de la Antártida.
-Moe Shislack se liga a Natacha.
-Rafael es elegido presidente de tu comunidad de vecinos y por fin todo el mundo saca la basura a su hora.
-Algo que te esperes.
Pues esto es lo que hay. Tendrás que comprarte el libro cuando lo veas en la librería de la estación o el aeropuerto, ¡que putada! veinte pavos por siete páginas. La ventaja es que le podrás decir a quién te acompañe en el viaje: el autor es amigo mio, un pedazo cabrón, pero definitivamente uno de los nuestros.
Saludos.
