Los que me conocéis más, sabéis que llevo una temporada entre Madrid y Amsterdam y que paso casi más tiempo en los aeropuertos que en casa.
Es lo que tienen las multinacionales ¿no?. Así que no nos quejaremos porque en el fondo hasta me gusta. (Y no está la cosa para quejarse)
Pero claro, todo tiene un precio en esta vida y el cansancio físico y mental no es gratuito. Esa sensación de estar "en tránsito" permanentemente es lo que me ha inspirado este tema (o lo que sea).
Así que, preparad los tomates que ahí va....
Venga, que la dedico a todos los que me vais aguantado tema tras tema.