Con el pedal looper más reciente de Boss, el RC-10R es relativamente sencillo grabar un par de progresiones de acordes acompañadas de baterías sincronizadas para poder improvisar, grabar arreglos o componer. En este vídeo echamos un vistazo rápido a sus prestaciones más llamativas.
el 29/10/201918
Lo mejor: Inspirador, divertido, amplia caja de ritmos.
Lo peor: Rigidez de uso, poco intuitivo a veces.
La segunda es que podemos realizar canciones con dos pistas independientes consecutivas, por ejemplo estrofa+estribillo, y movernos libremente de una a otra. Cada uno de los patrones rítmicos elegibles contiene dos variantes, una para cada pista, además de una intro, rellenos y un arreglo de batería para acabar la canción.
Lo mejor del aparato es que resulta muy inspirador a la hora de ensayar y esbozar canciones nuevas. Suena muy bien y es divertido. La biblioteca de patrones de batería y percusión es muy amplia y permite variedad y posibilidades de exploración. En ese sentido lo estoy disfrutando mucho.
Como puntos negativos: el precio, demasiado elevado en mi opinión, y la falta de entrada de micrófono, que le resta posibilidades de uso en directo. Además, el manejo a veces no es demasiado intuitivo y el manual impreso incluido no explica en profundidad las peculiaridades del aparato. Finalmente, la estructura de dos tracks puede resultar un poco rígida cuando la utilizamos junto a los patrones rítmicos, cosa que, como decía antes, no es obligada. De hecho utilizo muchas veces el Loop sin la caja de ritmos.
En resumen un aparato de calidad que mejora sustancialmente nuestros ratos con la guitarra.