Lo mejor: Sonido Bluegrass de verdad. Especificaciones standard con posibilidad de upgrade.
Lo peor: De fábrica vino mal ajustado
Este es mi Banjo. Punto.
Tiene sus cosas buenas y sus cosas malas, como los hijos, pero es un instrumento con el que he luchado, me he frustrado, he disfrutado, he aprendido, y espero que (tras el cambio de piezas por desgaste) me siga dando servicio por muchos años (till death do us part).
Cuando lo compré hace ya casi 10 años, tal como salió de la caja estaba mal ajustado y no afinaba porque los clavijeros estaban sueltos - además de ser de calidad ínfima. Nada que no se pudiera solventar en todo caso. Tras esta mala primera impresión, me gustó mucho su apariencia - es precioso - y me gustó mucho que pesara sus 6 o 7 kilos. Me explico: los banjos de verdad PESAN, ya que incluyen un tone-ring, un aro de acero o bronce que es lo que da su sonido punzante. Nota bene: Si vas a una tienda a por un banjo para tocar bluegrass, coges uno de los que tengan por allí y compruebas que no pesa, déjalo donde estaba porque no te va a servir. Quizás te sirva para clawhammer o para decorar tu pared, pero no para tocar Bluegrass - salvo que se trate de un Nechville o un Bishline o alguno de estos modernos: estos no pesan, pero es por las aleaciones que usan y valen de 4000 euros parriba, claro -.
Como todos los banjos "baratos" (hablamos de en torno a los 600 euros), los clavijeros son infames y el puente es para pegarle un tiro. Son piezas que hay que cambiar a la menor oportunidad posible. Actualmente tengo instalados clavijeros Schaller de estilo D-tuners (para cambiar rápido de afinación) en la 3ª y 2ª y un puente Scorpion.
El mástil es perfecto y permite una acción bajísima. Con el tiempo, sin embargo, y con el desgaste de los trastes, la cuerda 3ª ha dejado de entonar bien en trastes bajos (sí, en los bajos) y el traste 14 o 15 se ha levantado un milímetro haciendo que la cuerda prima trastee en esa posición. Otra pieza que se ha desgastado es la cejuela de la 5ª cuerda, de hecho se rompió y actualmente le tengo hecho un "apaño" con una cabeza de tornillo, que de momento funciona.
El resto de piezas no ha sufrido gran desgaste durante estos años, y, si algo les ocurriera, al tratarse de un banjo con especificaciones muy standard me va a permitir sustituirlas sin problemas.
En cuanto al sonido, suena muy bien (ha recibido elogios de profesionales del banjo legendarios como Tony Trischka) y da el tono característico del estilo.
Lo mejor: Sonido Bluegrass de verdad. Especificaciones standard con posibilidad de upgrade.
Lo peor: De fábrica vino mal ajustado
Tiene sus cosas buenas y sus cosas malas, como los hijos, pero es un instrumento con el que he luchado, me he frustrado, he disfrutado, he aprendido, y espero que (tras el cambio de piezas por desgaste) me siga dando servicio por muchos años (till death do us part).
Cuando lo compré hace ya casi 10 años, tal como salió de la caja estaba mal ajustado y no afinaba porque los clavijeros estaban sueltos - además de ser de calidad ínfima. Nada que no se pudiera solventar en todo caso. Tras esta mala primera impresión, me gustó mucho su apariencia - es precioso - y me gustó mucho que pesara sus 6 o 7 kilos. Me explico: los banjos de verdad PESAN, ya que incluyen un tone-ring, un aro de acero o bronce que es lo que da su sonido punzante. Nota bene: Si vas a una tienda a por un banjo para tocar bluegrass, coges uno de los que tengan por allí y compruebas que no pesa, déjalo donde estaba porque no te va a servir. Quizás te sirva para clawhammer o para decorar tu pared, pero no para tocar Bluegrass - salvo que se trate de un Nechville o un Bishline o alguno de estos modernos: estos no pesan, pero es por las aleaciones que usan y valen de 4000 euros parriba, claro -.
Como todos los banjos "baratos" (hablamos de en torno a los 600 euros), los clavijeros son infames y el puente es para pegarle un tiro. Son piezas que hay que cambiar a la menor oportunidad posible. Actualmente tengo instalados clavijeros Schaller de estilo D-tuners (para cambiar rápido de afinación) en la 3ª y 2ª y un puente Scorpion.
El mástil es perfecto y permite una acción bajísima. Con el tiempo, sin embargo, y con el desgaste de los trastes, la cuerda 3ª ha dejado de entonar bien en trastes bajos (sí, en los bajos) y el traste 14 o 15 se ha levantado un milímetro haciendo que la cuerda prima trastee en esa posición. Otra pieza que se ha desgastado es la cejuela de la 5ª cuerda, de hecho se rompió y actualmente le tengo hecho un "apaño" con una cabeza de tornillo, que de momento funciona.
El resto de piezas no ha sufrido gran desgaste durante estos años, y, si algo les ocurriera, al tratarse de un banjo con especificaciones muy standard me va a permitir sustituirlas sin problemas.
En cuanto al sonido, suena muy bien (ha recibido elogios de profesionales del banjo legendarios como Tony Trischka) y da el tono característico del estilo.
Lo podéis ver y oír en mi canal de youtube: https://www.youtube.com/watch?v=-tlnR7IMjdg&list=PL3L3soyEMVh7UQFQAv7uleQyYmgYy4NsW