Quisiera consultaros acerca de algunas dudas respecto a la afinación de mi guitarra eléctrica.
Hace poco que volví a tocar la guitarra después de varios años, y tras unos meses recordando lo que ya sabía y aprendiendo algunas nuevas cosas, he decidido lanzarme a experimentar con una afinación más grave, puesto que los grupos que escucho utilizan afinaciones más graves que la estándar.
Por lo tanto, hace un par de días contacté con un Luthier que me presupuestó el ajuste correspondiente a la nueva afinación y el nuevo juego de cuerdas (más gruesas) por 42€, y allá que voy la próxima semana.
Mi guitarra es una Ibanez RG421EX.
Pues bien, me surgen algunas dudas importantes al respecto.
1. Tengo entendido, que los cambios de afinación (sin previo ajuste) pueden afectar negativamente a la guitarra, por el tema de la tensión del mástil. Es totalmente comprensible, pero por más información que he buscado, no sé hasta qué punto se puede echar a perder una guitarra por cambiar la afinación, por ejemplo de estándar a DROP B. Algunos dicen que es una barbaridad, otros dicen que no pasa nada. Lo cierto es que hace un par de días probé, y al volver a la afinación estándar, y
algo no va bien en la primera y segunda cuerdas.
2. Teniendo en cuenta que quiero cambiar a DROP B, ¿Qué calibre de cuerdas sería el más adecuado? Tengo entendido que si se utilizan las más gruesas, la cosa se pone difícil para tocar todo lo que no seaacompañamiento rítmico. No me gustaría verme en semejante limitación, la verdad.
3. Una vez teniendo la guitarra ajustada para DROP B, ¿sería un problema afinarla puntualmente en DROP A, o acabaría teniendo problemas de afinación al volver a afinar en DROP B?
Son preguntas que quizás más de uno pueda encontrar incluso absurdas, pero ando devanándome los sesos con el tema desde hace unas semanas, y tengo que tomar decisiones de aquí al martes que llevo mi guitarra al luthier.
Un saludo