Por fin he podido sentarme un rato a darle un primer tiento al Soul Food y comparto las impresiones de Rich al 100%. Eso sí, media horita repartida entre una Strato y una Les Paul con un SuperChamp sin pasar el volúmen del 3, que tiembla toda la casa. Con la configuración que veis en la foto, mi primera impresión es que con el tono a la mitad respeta mucho mucho la ecualización del ampli y la guitarra y efectivamente. O sea, eso que se llama "transparente". El pote de tono además me ha parecido bastante sensible y se nota un cambio en el tono bastante evidente en cuanto lo mueves un poquito.
También comparto la impresión de que aporta una saturación muy suave. Con el ampli todavía frío y sin trabajar mucho, con el gain del pedal hasta un poco más de la mitad suena más como un booster que como un OD. Entiendo que está diseñado también para esta función y tiene pinta de que la cumple con creces, y que con un ampli más calentito ya rompiendo o a punto de romper sacará mucho más carácter. Por comprobarlo, he subido un momento el volúmen del ampli al 7 para tocar un lick o dos y lógicamente se nota la diferencia. En todo caso, aporta un empujón y un grano muy chulos. Entiendo la comparación con el Tubescreamer pero a la vez decir que no tienen mucho que ver. Evidentemente con la Les Paul saca un poco más de garra pero como no da mucha saturación se consigue limpiar el sonido estupendamente con el pote de volúmen de la guitarra. Aumentando el gain desde las 2 o las 3 a tope el carácter de OD se hace mucho más evidente. Se nota más el recorrido del pote y el incremento de ganancia, pero suena menos bonito si hay que decirlo todo, algo más chicharrero (creo que la mod de JHS va por el derrotero de solucionar eso, pero no me he informado mucho al respecto así que no tocaré el tema...).
Ahora me falta abrirlo para ver si el switch interno está en true bypass o buffer y cambiarlo a ver si se nota algo. Y usarlo con el grupo ya con el ampli a un poco más de volúmen, que seguro que cambiará bastante.
Como siempre, son impresiones mías, que tengo las orejas de cartón y muy castigadas...
