Fui invitado por un colega que va a ver a todo Dios blusero que pasa por Madrid. El tío estaba empeñado en que fuera a ver a Mr Sipp en su primera visita a España y me fui con él a la sala Boite. Lo primero que hice nada más entrar fue acercarme a ver el equipo que llevaba el amigo: Fender Hot Rod Deluxe, el "snake" si no me equivoco lleva un V30, una pedalera Boss :tasloco: y una Epiphone con P90 con una pintaza de la hostia. Me volví a mi sitio y le solté a mi colega: "pues lleva un equipillo un poco mierdoso".
Pasadas las 10 aparecen cuatro hermanos de color vestidos como si fueran los niños de San Ildefonso, pantalones de pinzas, pajaritas, camisas blancas y unos jerseys color rojo cereza. Los cuatro llevaban además sus gafas de pasta con lo que parece un esparadrapo blanco en la junta, como si estuviera rotas y arregladas en plan cutre. Sin preámbulo ninguno empiezan a tocar a toda pastilla y dos compases después mi colega se gira y me dice cual profeta del Mississippi: "Esto va a ser la polla".
Y así fue, señores. Dos temas después Mr Sipp se arranca con un blues lento y a los dos minutos está paseándose entre el público con la Epiphone echando chispas. En el tercer tema. Como para decirnos "cuidadín que esto va en serio". Bestial, le tengo a dos metros de mi rodeado de gente y no he visto en mi puta vida tocar a alguien así, virgen santa que bestia. Los pelos como escarpias y una emoción subiendo desde el estómago y terminado en un me quito las gafas por Dios y que nadie me vea porque estoy llorando. No exagero. Bestial.
A partir de ahí ya sabíamos todos que lo de este tío no es normal. Sigue con la marcha. Se descuelga la guitarra, se marca un tema gospel de acojonar, una versión del Little Wing de Jimi Hendrix, más temazos y se nos pira. Ha tocado más de hora y media y parece que lleva 10 minutos. Ha arrasado tocando cantando y haciendo gestos mientras sonrie y nos hace sonreir a todos. Parece que no va a salir más, pero vuelve y nos regala un temazo supermarchoso mientras hace botar a todo el personal. Nosotros flipamos, pero él se lo pasó teta.
Cuando termina el concierto, camino a casa, voy pensando lo que da de sí una pedalera boss y un Hot Rod Deluxe, lo que puede dar la puñetera pentatónica y lo que pierdo el tiempo cambiando de equipo y buscando un sonido que no va a aparecer hasta que no me revienten las puntas de los dedos.
Si Mr Sipp llega a tu ciudad no te lo pierdas. En serio. Este hermano gemelo de Steve Urkel te hará flipar y cuando termine el bolo y te pregunte "He sido yooooo???" Podrás decirle "Sí cabrón, has sido tú el que la ha liado parda"
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