Estoy seguro de que todo el mundo ha pasado alguna vez por lo que yo he pasado: "quiero una guitarra nueva, pero no sé cual" A partir de ahí empieza la aventura. Horas y horas dejándose los pies en las calles viajando de tienda en tienda, desgastándose los dedos en probar y probar, y deteriorándose la vista tras horas y horas de foro y Youtube. Y de pronto cuando ya está a punto de pasarse el ataque de GAS, resulta que en un oscuro rincón de una pequeña tienda en un sórdido callejón, aparece lo que estabas buscando.
En una calle trasera de Cáceres hay una tienda de música. Entre Ibanez de gamas bajas, Epiphones y packs de iniciación, en la última percha de la pared del fondo, parcialmente oculta tras una columna, el dueño había escondido la mejor guitarra no de la tienda, si no de toda las tiendas de la ciudad (esto es más un desprecio a la ciudad que un halago a la guitarra). Allí se encontraba una Gibson SG Standard del 2015. La bajo, la pruebo, y me la llevo. Aún no sé si he tomado la decisión inteligente, pero era lo que me pedía el cuerpo en ese momento.
Características oficiales:
Cuerpo: Caoba "multi matched" de grano ultrafino. No tengo muy claro qué significa esto, a simple vista parace ser una sola pieza de madera sólida.
Mástil: Perfil "Slim Taper" de caoba de un sola pieza, con diapasón de palorrosa, 22 trastes, traste cero de latón criogenizado. Clavijero con sistema de afinación electrónica G-Force. Unión mortis y tenon encolada.
Puente: Tune-o-Matic con silletas de titanio
Electrónica: Dos pastillas "57 Classic". Selector de 3 posiciones. Dos potes de tono y dos de volumen con split-coil.
Acabado: Translucent Ebony (en mi caso) con lacado en nitrocelulosa.
Más detalles en: http://www.gibson.com/Products/Electric-Guitars/2015/USA/SG-Standard.aspx
Debo decir que no tengo ni idea de lo que significa muchas de las cosas que acabo de escribir, solo las copio de la web oficial. Soy un ignorante en temas de guitarras, y además toco muy mal, así que perdonad las imprecisiones que pueda cometer
La primera impresión
Bueno, obviando la prueba de tienda, la priema impresión es magnífica. Me entregan la guitarra en un estuche duro de color champán con tres broches metálicos y asas de cuero, y que pesa bastante para un alfeñique como yo. Cuando llego a casa esto es lo que me encuentro:
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La primera impresión de es calidad, con ese acabado tan liso y pulido como un espejo, y con el cromado del hardware brillando al la escasa luz solar de la mañana y al flash de la cámara. La cojo en mis manos y le doy vueltas, buscando defectos. El único defecto es la cejuela de latón, que tiene un par de puntos negros submilimétricos, que no se si es óxido, suciedad. Luego hay algunas marcas de uso, propias de un artículo de exposición, pero para eso están los descuentos. En general, está impecable.
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El cuerpo
El lacado de nitrocelulosa es uniforme y está perfectamente aplicado, y permite ver la veta de la caoba al tiempo que le da un magnífico brillo a la guitarra. Las pastillas y el puente tienen un cromado increible. Tiene un golpeador de plástico negro, que justo encima de la pastilla del mastil, en el espacio entre la pastilla y el fin del mástil, suena a hueco cuando lo golpeas, como si no hubiera madera entre ambas partes. Tiene cuatro potenciómetros tipo campana graduados del uno al 10, como Gibson ha hecho toda la vida.
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Como ya he dicho, se supone que son varias piezas de caoba. Pero yo no tengo huevos de ver la unión entre piezas. Así que o me ha tocado la lotería del cuerpo perfecto (no sería el primero, por lo que he averiguado), o son unos verdaderos hachas ocultándolo. A ver si alguno sois capaces de ver la unión entre bloques.
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El mástil
El mástil es tipo Slim, por lo que supongo que es el más fino de Gibson, sin embargo, y esto es una apreciación personal, me ha parecido demasiado grande y gordo, y me ha costado hacerme a él. Pero una vez pasado el periodo de adaptación, me doy cuenta de que gracias a ese tamaño no solo consigo el sonido que Gibson ha implantado en nuestro subconsciente colectivo, sino que resulta más fácil hacer cosas como vibratos y bendings, ya que es más ancho de lo normal. Los trastes son más bien pequeños (creo que son medium, pero no encuentro el dato oficial) y están perfectamente acabados. Debo decir que llegan hasta el borde del diapasón, pasando por encima del binding. Esta es mi primera Gibson, así que no sé si es lo normal o no, pero el tendero me lo hizo notar como una novedad, así que yo os lo transmito.
De la afinación hablaré luego.
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En el clavijero vemos una inscripción Gibson de madreperla y una reproducción de la firma de Les Paul en referencia a su 100 cumpleaños. POr detrás viene el afinador y un holograma con el busto de Les Paul
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Empecemos de una vez
Agarro la guitarra, le engancho una correa normal y corriente en los enganches de tipo normal. Y debo decir que me encuentro entonces con lo que considero el peor defecto de la guitarra: cabecea como un muñeco cabezón en un tractor. Entre lo ligero que es el cuerpo, lo pesado que es el mástil y el clavijero, y lo mal situados que están los enganches (ambos están justo en el eje central, uno en el borde inferior y otro detrás de la unión entre mástil y cuerpo), es imposible mantener la guitarra en su sitio sin sujetarla. Quizá una buena correa de esas que se pegan a la ropa lo arreglaría, pero de momento tengo que andarme con ojo porque si no el clavijero me va a dar una hostia contra el suelo que la va a dejar hecha un Steinberg de la vida.
La acción es muy baja sin que trastee en ningún momento. Viene encordada con unas 0,09 – 0,46. Yo siempre he utilizado 0,09 – 0,42, por lo que la última cuerda me suena demasiado oscura y apagada casi como si hiciera un palm mutting contínuo. En distorsión no se nota apenas, pero en limpio sí. No sé si esto es normal o si es un defecto, yo no veo que haga contacto en ningún sitio anormal. Tengo que probar con una 0,42.
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El sonido
Bueno, llega el momento de la verdad. La enchufamos a un Jet City valvular y damos el primer puazo. Cualquier duda que pudiera tener desaparece. Esta guitarra tiene todo, tiene alma, tiene un cuerpo y un sustain brutal. Las pastillas 57 Classic dan un magnífico sonido, tanto en limpio como en distorsión. Tienen una buena ganancia, sirviendo perfectamente para tocar heavy metal sin necesidad de ayuda. Con un amplificador adecuado o un overdrive, podemos tocar perfectamente cosas como Thrash o Death, aunque se nota que no es su especialidad; no esperéis que se comporte ocmo una EMG, que le salen armónicos sólo con mirarlas. Estas pastillas nacieron para el rock ,el hard rock y el heavy de los 80. Métele unos acordes de AC/DC, unos riffs de Black Sabbath o un solo de Randy Rhoads, y sentirás las llamas corriendo entre tus dedos. Y cuando quieras tranquilizarte, simplemente baja el volumen de las pastillas, convierte la distorsión más burra en el limpio más cristalino sin perder agudos.
No he abierto la tapa de la electrónica, pero supongo que me encontraría unos buenos condensadores y un mal apantallado. Sí, ese es el otro defecto, coge ruidos externos con demasaida facilidad para ser una guitarra de esta gama. Y no creo que sea problema de mi equipo porque al conectar mi Cort con EMGs activas no tengo ese problema. Tengo una Jackson que sí hace ruido, pero es cierto que la electrónico está fastidiada, así que no la incluyo en la comparación.
Me gustaría añadir una muestra de sonido, pero no tengo medios para una grabación adecuada.
El afinador G-Force
Incluyo esto en un apartado diferente, porque creo que es el tema más polémico. Por lo que he visto en Internet, ha sido considerado como la impía estirpe de Satanás, y no he leído más que insultos, pero creo que en ningún momento he leído una opinión objetiva de alguien que tenga una guitarra con este sistema.
Básicamente, le das a un botón, tocas las cuerdas, y las clavijas empiezan a girar por sí solas, hasta quedar perfectamente afinadas. Puedes elegir entre unas doce afinaciones preestablecidas, y guardar otras seis personalizadas. Incluye una batería y un cargador, así que no gasta pila.
¿Funciona bien? Sí, a la perfección. ¿Está bien construido? Yo diría que sí, las clavijas son de metal y la caja de la electrónica es de plástico con botones de plástico también, pero parece de buena factura. ¿Durará mucho tiempo? Esa es mi duda. Todos sabemos que la electrónica, por muy bien hecha que esté fabricada, tiene una fecha de caducidad, y más cuando incluye elementos mecánicos. Así que no se si esta va a ser una guitarra para toda la vida, como siempre se ha dicho de las Gibson, y sin duda afectará a su precio de venta. Además tiene pinta de incluir parte del mecanismo dentro de la madera del clavijero, así que no creo que sea fácil de retirar. En cualquier caso, se puede seguir afinando a mano como se ha hecho toda la vida, así que si algún día llega a estropearse, no habrás perdido la guitarra.
En resumen
Me ha costado 1500 euros. Un precio que comparado con otras tiendas online, es cara, pero me ha merecido la pena por razones que no expondré aquí. Es un verdadero guitarrón, con un sonido que enamora y una acción que la hace comodísima, tanto para acordes, como para solear. Puede enfrentarse a cualquier género musical, flaqueando quizá en el metal más extremo.
Como defectos, su cabeceo y su mal apantallado, ambos asumibles pero evidentes.
Esta ha sido mi primera Gibson y si 2015 ha sido considerado un mal año, cómo serán los buenos...
En una calle trasera de Cáceres hay una tienda de música. Entre Ibanez de gamas bajas, Epiphones y packs de iniciación, en la última percha de la pared del fondo, parcialmente oculta tras una columna, el dueño había escondido la mejor guitarra no de la tienda, si no de toda las tiendas de la ciudad (esto es más un desprecio a la ciudad que un halago a la guitarra). Allí se encontraba una Gibson SG Standard del 2015. La bajo, la pruebo, y me la llevo. Aún no sé si he tomado la decisión inteligente, pero era lo que me pedía el cuerpo en ese momento.
Características oficiales:
Cuerpo: Caoba "multi matched" de grano ultrafino. No tengo muy claro qué significa esto, a simple vista parace ser una sola pieza de madera sólida.
Mástil: Perfil "Slim Taper" de caoba de un sola pieza, con diapasón de palorrosa, 22 trastes, traste cero de latón criogenizado. Clavijero con sistema de afinación electrónica G-Force. Unión mortis y tenon encolada.
Puente: Tune-o-Matic con silletas de titanio
Electrónica: Dos pastillas "57 Classic". Selector de 3 posiciones. Dos potes de tono y dos de volumen con split-coil.
Acabado: Translucent Ebony (en mi caso) con lacado en nitrocelulosa.
Más detalles en: http://www.gibson.com/Products/Electric-Guitars/2015/USA/SG-Standard.aspx
Debo decir que no tengo ni idea de lo que significa muchas de las cosas que acabo de escribir, solo las copio de la web oficial. Soy un ignorante en temas de guitarras, y además toco muy mal, así que perdonad las imprecisiones que pueda cometer
La primera impresión
Bueno, obviando la prueba de tienda, la priema impresión es magnífica. Me entregan la guitarra en un estuche duro de color champán con tres broches metálicos y asas de cuero, y que pesa bastante para un alfeñique como yo. Cuando llego a casa esto es lo que me encuentro:
[ Imagen no disponible ]
[ Imagen no disponible ]
La primera impresión de es calidad, con ese acabado tan liso y pulido como un espejo, y con el cromado del hardware brillando al la escasa luz solar de la mañana y al flash de la cámara. La cojo en mis manos y le doy vueltas, buscando defectos. El único defecto es la cejuela de latón, que tiene un par de puntos negros submilimétricos, que no se si es óxido, suciedad. Luego hay algunas marcas de uso, propias de un artículo de exposición, pero para eso están los descuentos. En general, está impecable.
[ Imagen no disponible ]
El cuerpo
El lacado de nitrocelulosa es uniforme y está perfectamente aplicado, y permite ver la veta de la caoba al tiempo que le da un magnífico brillo a la guitarra. Las pastillas y el puente tienen un cromado increible. Tiene un golpeador de plástico negro, que justo encima de la pastilla del mastil, en el espacio entre la pastilla y el fin del mástil, suena a hueco cuando lo golpeas, como si no hubiera madera entre ambas partes. Tiene cuatro potenciómetros tipo campana graduados del uno al 10, como Gibson ha hecho toda la vida.
[ Imagen no disponible ]
[ Imagen no disponible ]
Como ya he dicho, se supone que son varias piezas de caoba. Pero yo no tengo huevos de ver la unión entre piezas. Así que o me ha tocado la lotería del cuerpo perfecto (no sería el primero, por lo que he averiguado), o son unos verdaderos hachas ocultándolo. A ver si alguno sois capaces de ver la unión entre bloques.
[ Imagen no disponible ]
El mástil
El mástil es tipo Slim, por lo que supongo que es el más fino de Gibson, sin embargo, y esto es una apreciación personal, me ha parecido demasiado grande y gordo, y me ha costado hacerme a él. Pero una vez pasado el periodo de adaptación, me doy cuenta de que gracias a ese tamaño no solo consigo el sonido que Gibson ha implantado en nuestro subconsciente colectivo, sino que resulta más fácil hacer cosas como vibratos y bendings, ya que es más ancho de lo normal. Los trastes son más bien pequeños (creo que son medium, pero no encuentro el dato oficial) y están perfectamente acabados. Debo decir que llegan hasta el borde del diapasón, pasando por encima del binding. Esta es mi primera Gibson, así que no sé si es lo normal o no, pero el tendero me lo hizo notar como una novedad, así que yo os lo transmito.
De la afinación hablaré luego.
[ Imagen no disponible ]
En el clavijero vemos una inscripción Gibson de madreperla y una reproducción de la firma de Les Paul en referencia a su 100 cumpleaños. POr detrás viene el afinador y un holograma con el busto de Les Paul
[ Imagen no disponible ]
[ Imagen no disponible ]
Empecemos de una vez
Agarro la guitarra, le engancho una correa normal y corriente en los enganches de tipo normal. Y debo decir que me encuentro entonces con lo que considero el peor defecto de la guitarra: cabecea como un muñeco cabezón en un tractor. Entre lo ligero que es el cuerpo, lo pesado que es el mástil y el clavijero, y lo mal situados que están los enganches (ambos están justo en el eje central, uno en el borde inferior y otro detrás de la unión entre mástil y cuerpo), es imposible mantener la guitarra en su sitio sin sujetarla. Quizá una buena correa de esas que se pegan a la ropa lo arreglaría, pero de momento tengo que andarme con ojo porque si no el clavijero me va a dar una hostia contra el suelo que la va a dejar hecha un Steinberg de la vida.
La acción es muy baja sin que trastee en ningún momento. Viene encordada con unas 0,09 – 0,46. Yo siempre he utilizado 0,09 – 0,42, por lo que la última cuerda me suena demasiado oscura y apagada casi como si hiciera un palm mutting contínuo. En distorsión no se nota apenas, pero en limpio sí. No sé si esto es normal o si es un defecto, yo no veo que haga contacto en ningún sitio anormal. Tengo que probar con una 0,42.
[ Imagen no disponible ]
El sonido
Bueno, llega el momento de la verdad. La enchufamos a un Jet City valvular y damos el primer puazo. Cualquier duda que pudiera tener desaparece. Esta guitarra tiene todo, tiene alma, tiene un cuerpo y un sustain brutal. Las pastillas 57 Classic dan un magnífico sonido, tanto en limpio como en distorsión. Tienen una buena ganancia, sirviendo perfectamente para tocar heavy metal sin necesidad de ayuda. Con un amplificador adecuado o un overdrive, podemos tocar perfectamente cosas como Thrash o Death, aunque se nota que no es su especialidad; no esperéis que se comporte ocmo una EMG, que le salen armónicos sólo con mirarlas. Estas pastillas nacieron para el rock ,el hard rock y el heavy de los 80. Métele unos acordes de AC/DC, unos riffs de Black Sabbath o un solo de Randy Rhoads, y sentirás las llamas corriendo entre tus dedos. Y cuando quieras tranquilizarte, simplemente baja el volumen de las pastillas, convierte la distorsión más burra en el limpio más cristalino sin perder agudos.
No he abierto la tapa de la electrónica, pero supongo que me encontraría unos buenos condensadores y un mal apantallado. Sí, ese es el otro defecto, coge ruidos externos con demasaida facilidad para ser una guitarra de esta gama. Y no creo que sea problema de mi equipo porque al conectar mi Cort con EMGs activas no tengo ese problema. Tengo una Jackson que sí hace ruido, pero es cierto que la electrónico está fastidiada, así que no la incluyo en la comparación.
Me gustaría añadir una muestra de sonido, pero no tengo medios para una grabación adecuada.
El afinador G-Force
Incluyo esto en un apartado diferente, porque creo que es el tema más polémico. Por lo que he visto en Internet, ha sido considerado como la impía estirpe de Satanás, y no he leído más que insultos, pero creo que en ningún momento he leído una opinión objetiva de alguien que tenga una guitarra con este sistema.
Básicamente, le das a un botón, tocas las cuerdas, y las clavijas empiezan a girar por sí solas, hasta quedar perfectamente afinadas. Puedes elegir entre unas doce afinaciones preestablecidas, y guardar otras seis personalizadas. Incluye una batería y un cargador, así que no gasta pila.
¿Funciona bien? Sí, a la perfección. ¿Está bien construido? Yo diría que sí, las clavijas son de metal y la caja de la electrónica es de plástico con botones de plástico también, pero parece de buena factura. ¿Durará mucho tiempo? Esa es mi duda. Todos sabemos que la electrónica, por muy bien hecha que esté fabricada, tiene una fecha de caducidad, y más cuando incluye elementos mecánicos. Así que no se si esta va a ser una guitarra para toda la vida, como siempre se ha dicho de las Gibson, y sin duda afectará a su precio de venta. Además tiene pinta de incluir parte del mecanismo dentro de la madera del clavijero, así que no creo que sea fácil de retirar. En cualquier caso, se puede seguir afinando a mano como se ha hecho toda la vida, así que si algún día llega a estropearse, no habrás perdido la guitarra.
En resumen
Me ha costado 1500 euros. Un precio que comparado con otras tiendas online, es cara, pero me ha merecido la pena por razones que no expondré aquí. Es un verdadero guitarrón, con un sonido que enamora y una acción que la hace comodísima, tanto para acordes, como para solear. Puede enfrentarse a cualquier género musical, flaqueando quizá en el metal más extremo.
Como defectos, su cabeceo y su mal apantallado, ambos asumibles pero evidentes.
Esta ha sido mi primera Gibson y si 2015 ha sido considerado un mal año, cómo serán los buenos...