Lo mejor: Versatilidad sonora increíble, con un sustain y comodidad inigualables que la hacen ideal para cualquier estilo.
Lo peor: Es cara
Datos de la unidad comentada
| Año de fabricación: 2021 | Precio pagado: 3 € (nuevo)
La Gibson ES-335 es un modelo clásico que, desde su lanzamiento en 1958, ha sido el referente en versatilidad sonora. La versión actual, fabricada en Nashville, sigue fiel a esa tradición.
Su construcción es excelente, como cabe esperar en esta gama de precios. Cuenta con una tapa laminada de arce/álamo/arce y un bloque central de arce macizo que le dan una resonancia y un sustain brutales. Su mástil de caoba en forma de C y el diapasón de palisandro hacen que tocarla sea un verdadero placer. Las pastillas humbucker T-Type de Gibson, junto con los controles cableados a mano, te permiten sacar todo tipo de sonidos, desde tonos limpios y cálidos hasta distorsiones potentes
Tiene una garra increíble, un sustain enorme y llegar a los trastes agudos es muy fácil, algo que no siempre ocurre con otras Gibson como las Les Paul. Además, se siente súper cómoda en las manos. Su limpio es muy definido y con mucho cuerpo, si usas bien el control de tono es fácil encontrar un tono tipo Wes Montgomery. Por otro lado, cuando la conecté a un ampli valvular con un pedal mid gain, saqué sonidos tipo Led Zeppelin y AC/DC sin esfuerzo.
Es una guitarra cara, pero tras probar varias semihuecas en diferentes gamas de precios, puedo afirmar que es difícil batir a la ES-335 en cuanto a sonido, timbre y tacto. Aunque hay opciones más económicas, creo que ninguna iguala el estándar sonoro que establece este modelo.
Literalmente, el mejor instrumento que he tenido en mis manos.
Lo mejor: Versatilidad sonora increíble, con un sustain y comodidad inigualables que la hacen ideal para cualquier estilo.
Lo peor: Es cara
Su construcción es excelente, como cabe esperar en esta gama de precios. Cuenta con una tapa laminada de arce/álamo/arce y un bloque central de arce macizo que le dan una resonancia y un sustain brutales. Su mástil de caoba en forma de C y el diapasón de palisandro hacen que tocarla sea un verdadero placer. Las pastillas humbucker T-Type de Gibson, junto con los controles cableados a mano, te permiten sacar todo tipo de sonidos, desde tonos limpios y cálidos hasta distorsiones potentes
Tiene una garra increíble, un sustain enorme y llegar a los trastes agudos es muy fácil, algo que no siempre ocurre con otras Gibson como las Les Paul. Además, se siente súper cómoda en las manos. Su limpio es muy definido y con mucho cuerpo, si usas bien el control de tono es fácil encontrar un tono tipo Wes Montgomery. Por otro lado, cuando la conecté a un ampli valvular con un pedal mid gain, saqué sonidos tipo Led Zeppelin y AC/DC sin esfuerzo.
Es una guitarra cara, pero tras probar varias semihuecas en diferentes gamas de precios, puedo afirmar que es difícil batir a la ES-335 en cuanto a sonido, timbre y tacto. Aunque hay opciones más económicas, creo que ninguna iguala el estándar sonoro que establece este modelo.
Literalmente, el mejor instrumento que he tenido en mis manos.