Lo mejor: Buen sonido, sin grandes pretensiones, y facilidad de uso
Lo peor: Suena algo "digital". La salida con emulación de altavoz es inútil.
Este fue mi primer multiefectos, sobre el que eché muchas horas dentro y fuera del escenario y el que, gracias a su estudio a fondo, me ha permitido comprender otros aparatos más complejos con relativa facilidad.
Lo tengo desde primeros de los años 90. Recuerdo que me costó 45.000 pesetas de la época en Musical Ortiz de Sevilla. En ese momento, la mitad de un sueldo normalito.
Dispone de los efectos típicos, los cuales se pueden activar o desactivar individualmente en cada preset, y una función relé para cambiar de canal o conmutar efectos del ampli al que esté conectado. Además de los presets de fábrica, dispone del mismo número de localizaciones de memoria para presets de usuario.
En cuanto al sonido, es bastante básico pero cumple su cometido. A estas alturas ya tengo el oído hecho a productos de bastante más calidad e inmediatamente le oigo los artefactos típicos de los aparatos digitales baratos, sobre todo en los efectos de modulación. Aún así, para conseguir sonidos resultones rápidos sirve perfectamente.
Es un aparato robusto, que después de 20 años solo ha sufrido el desgaste de la pila de respaldo, que he podido cambiar con relativa facilidad - aunque tuve que echar mano de soldador para desprenderla.
Lo mejor: Buen sonido, sin grandes pretensiones, y facilidad de uso
Lo peor: Suena algo "digital". La salida con emulación de altavoz es inútil.
Lo tengo desde primeros de los años 90. Recuerdo que me costó 45.000 pesetas de la época en Musical Ortiz de Sevilla. En ese momento, la mitad de un sueldo normalito.
Dispone de los efectos típicos, los cuales se pueden activar o desactivar individualmente en cada preset, y una función relé para cambiar de canal o conmutar efectos del ampli al que esté conectado. Además de los presets de fábrica, dispone del mismo número de localizaciones de memoria para presets de usuario.
En cuanto al sonido, es bastante básico pero cumple su cometido. A estas alturas ya tengo el oído hecho a productos de bastante más calidad e inmediatamente le oigo los artefactos típicos de los aparatos digitales baratos, sobre todo en los efectos de modulación. Aún así, para conseguir sonidos resultones rápidos sirve perfectamente.
Es un aparato robusto, que después de 20 años solo ha sufrido el desgaste de la pila de respaldo, que he podido cambiar con relativa facilidad - aunque tuve que echar mano de soldador para desprenderla.