Tu pedalera de efectos: 12 razones por las que la odias (y la amas)
Nos reímos mucho en su momento con vuestros ingeniosos comentarios en el artículo "Las 12 cosas que más odias de tu pedalera de efectos", en el que además de ofreceros un buen puñado de motivos por los que a menudo perdemos los nervios con nuestros pedales, vosotros añadisteis unos cuantos más.
La verdad es que las pedaleras son una de las alegrías de la vida, y eso es así; pero también nos consumen una cantidad de horas de planificación e insatisfacción por no lograr la perfección obsesivo-compulsiva total. Y hay que admitirlo, no son la definición total de la practicidad ni la facilidad de construcción, sobre todo si son grandes. Por eso, recuperar la perspectiva de vez en cuando con un poco de humor antes de perder el norte por completo, es algo recomendable para cualquier guitarrista de perfil perfeccionista.
Esperamos que os riáis un poco con este vídeo y, por favor, no dejéis de añadir vuestras aportaciones personales, que son siempre la guinda perfecta para el pastel.