Muy buenas compañeros! No pretendo hacer una review al uso de esta guitarra, sencillamente porque no me siento autorizado siendo esta mi primera y única Strato. Así que si los administradores consideran mover este hilo a otro sitio más adecuado, pues perfecto.
No voy a poner los datos técnicos ni fotos detalladas de estudio, porque todo esto está ampliamente disponible en internet y seria aburrido. Ademas parece que no puedo cargar fotos desde el iPad.
Lo que pretendo es contar mi experiencia personal para ayudar a otros, por dos razones: porque yo no encentré una review en español sobre esta guitarra antes de comprarla, y porque siendo un modelo limitado de 2014, todavía quedan unidades en algunas tiendas, y doy fe de que ahora pueden sacarse a buen precio, y sinceramente, creo que es un buena oportunidad para el que esté mirando y se encuentre indeciso.
Adelanto mi conclusión: es todo un guitarrón!
Como sabéis, es una Classic Player 50’s, modelo de sobra conocido y con muy buena reputación, dentro de la gama Deluxe MIM y con diseño de la Custom Shop, siendo probablemente de lo mejor que se puede encontrar en Fender MIM (entre otros modelos tales como la Deluxe Player or las Road Worn).
Poniéndonos en antecedentes, era finales de Diciembre de 2014, y después de meses de ahorro y horas de youtube viendo pruebas y comparativas, estaba decidido a compararme una Stratocaster tras años tocando una Epiphone Les Paul Custom (muy poco, la verdad), y sabiendo que iba a tener que conformarme con una MIM por presupuesto. En el punto de mira estaba la nueva Lonestar por el tema de la humbucker del puente con coil tap, por eso de tener total versatilidad. Pero por supuesto, me recorrí todas las tiendas de Madrid junto con un amigo que sí se puede considerar buen conocedor de la Stratocaster, como guía y ayuda, y toqué no todos los modelos, pero sí una de cada gama desde las MIM hasta la American Standard, pasando por la controvertida American Special, que he de decir que me pareció también un guitarrón muy remendable, si ese es el estilo que se está buscando.
Como conclusión a mi inexperto análisis sobre todas las stratos que probé, diré que el precio no engaña, a más cara, mejor guitarra, y lo siento, pero es así. Hasta yo pude darme cuenta de eso. Si no hubiera tenido un presupuesto muy concreto, me hubiera comprado la Am Standard sí, o sí, se tocaba como mantequilla, el mástil es una pasada y del sonido qué voy a decir.
En el siguiente rango de precios, sobre 900 € ya optas a una Am Special, que como digo no es mala guitarra en absoluto, o ya a las series especiales MIM, como las Road Worn, la Deluxe Player, las classic player en nitrocelulosa, o la propia edición especial 60 aniversario de la Classic Player 50’s, la cual inicialmente no probé, porque no me llamaba la atención ni el rollo del aniversario, ni los complementos ni nada de eso, y pensaba que la diferencia de dinero estaría ahí. He de decir que mi presupuesto no llegaba a estas cifras, y me encontré con la disyuntiva de escoger alguna de las Deluxe o Classic Player por entorno a 700 – 750€ (por cierto, la Lonestar no la tenían en ningún sitio), las cuales tras probar cualquiera de las anteriores que he citado se quedaban un poco cortas, o esperar y seguir ahorrando para poder alcanzar a una de estas guitarras, llamémoslas “intermedias” entra las Deluxe y las MIA. Realmente creo que entre estas dos gamas hay un pequeño escalón de precio, y también lo hay en calidad, y se nota.
Total, y para no aburrir al personal, voy al grano. En un ninguna de las tiendas tenían la Classic Player 50’s, que era una de mis alternativas (parece que la 60’s es la que tiene demanda, según me dijeron), y no quería decidirme por ninguna otra hasta probar las pastillas American Vintage que monta este modelo, además de que estéticamente, en acabado sunburst y mástil de arce, me encanta. Así que cogí la 60th anniversary con el único objetivo de probar sus pastilla, y de repente, con el primer rasgeo, ¡algo sucedió! Parecía que el cuarto de pruebas se iluminaba de repente. Desenchufé la guitarra y la toqué a pelo (vengo de la guitarra clásica y me gusta escuchar la acústica pura de las quitarras, así desenchufadas), y quedé maravillado con la resonancia, la cantidad de armónicos que sonaban por todas partes, y de la calidad acústica global de esa guitarra. Ninguna otra de las que tenía por allí, o de las que ya había probado, había sonado así.
Y qué es eso que tiene esta guitarra en particular que la hace, no solo especial, sino realmente un instrumento con una relación calidad/precio fuera de lo común? Pues en mi ignorancia técnica sobre stratos en particular, el chico de la tienda, encantador, me explico el “truco”, y es ni más ni menos que el acabado en Nitrocelulosa, junto con una guitarra de buena calidad y muy bien construida, por supuesto. Me explicó un poco qué era eso de la nitrocelulosa, y que en la actualidad solo los modelos de muy alta gama la llevan. Yo puedo aseguraros que es una diferencia no solo notable, sino abismal, y cualquiera puede ir a una tienda y pedir una guitarra con este acabado y compararla con cualquier otra de similar nivel, claro, pero con otro acabado de los más habituales, normalmente poliéster.
Esta guitarra, así, desenchufada, con un mástil que tiene comodísimo y en general muy bien construida y acabada, dejó atrás a todas excepto quizás a la American Standard en cuanto al tacto y al mástil, que me enamoró. Una vez enchufada, y renunciando a mi idea de la humbucker en el puente, apreciamos un sonido stratocaster puro 100x100, super limpio, super brillante, redondo, con una dinámica genial y con cero ruido, ni siquiera con alta ganancia. La guitarra me conquistó, y no por su estética, la verdad, porque tanto dorado a mí se me atragantaba. Ahora tenía el problema del presupuesto, todo era empatizar con el vendedor, hablar un poquito de todo un poco, y que ésta fuera la última guitarra que tenían de esta serie limitada. Además, que fuera ya casi fin de año, y todo hay que decirlo, que la guitarra tuviera un pequeño arañazo inapreciable en un canto que me sirvió de argumento, me ayudó bastante a conseguir un precio que podía pagar. El trato estaba hecho, y la saqué por un precio que hacía de la ecuación Calidad/Precio algo realmente excepcional, comparando con los precios de las guitarras que llevaba tocando toda la mañana.
Además, la guitarra viene con un estuche tweed deluxe espectacular, súper bonito y bastante sólido, algo que no trae ninguna de las guitarras antes mencionadas, excepto ya la Am Standard. Solo esto ya cuesta una pasta!
Una vez con la guitarra de mi propiedad, ya solo me quedaba enorgullecerme de tener una edición especial, limitada, con alguna chorrada como el medallón conmemorativo, el libro exclusivo de la Stratocaster, etc. Algo que sin ser importante, después de todo le sumar valor.
Después de 4 meses con ella, no puedo estar más contento, me encanta tocarla por la noche, cuando todos en casa se han ido a la cama, desenchufada, con luz baja, y disfrutar de su increíble sonido acústico. Además la guitarra no se desafina nada, pero nada de nada, cero, con uso de tremolo y todo. El tema de los dorados lo solucioné rápido cambiando el golpeador original, que guardo impoluto, por uno blanco “parchment” que va muy bien con el blanco envejecido de los controles. Ahora parece una Reissue 56 de la custom shop, pero con las pastillas American Vintage 57/62, que son la caña, la verdad (quizás la del puente un poco chillona, pero esto ya va en gustos, o en ajuste, vete tu a saber).
En definitiva, no puedo estar más contento, y cuando las veo aún disponibles en algunas tiendas online donde las están ofreciendo a precio de liquidación, me dan ganas de ir a comprar otra!! Así que, si estáis en ese delicioso momento de buscar vuestra strato ideal, y os estáis volviendo locos con el tema MIM o MIA, que si hay diferencia, que si tal, os animo como poco a que busquéis y probéis esta guitarra antes de que se acaben. No os dejara indiferentes, y la compra siempre merecerá la pena.
Saludos
No voy a poner los datos técnicos ni fotos detalladas de estudio, porque todo esto está ampliamente disponible en internet y seria aburrido. Ademas parece que no puedo cargar fotos desde el iPad.
Lo que pretendo es contar mi experiencia personal para ayudar a otros, por dos razones: porque yo no encentré una review en español sobre esta guitarra antes de comprarla, y porque siendo un modelo limitado de 2014, todavía quedan unidades en algunas tiendas, y doy fe de que ahora pueden sacarse a buen precio, y sinceramente, creo que es un buena oportunidad para el que esté mirando y se encuentre indeciso.
Adelanto mi conclusión: es todo un guitarrón!
Como sabéis, es una Classic Player 50’s, modelo de sobra conocido y con muy buena reputación, dentro de la gama Deluxe MIM y con diseño de la Custom Shop, siendo probablemente de lo mejor que se puede encontrar en Fender MIM (entre otros modelos tales como la Deluxe Player or las Road Worn).
Poniéndonos en antecedentes, era finales de Diciembre de 2014, y después de meses de ahorro y horas de youtube viendo pruebas y comparativas, estaba decidido a compararme una Stratocaster tras años tocando una Epiphone Les Paul Custom (muy poco, la verdad), y sabiendo que iba a tener que conformarme con una MIM por presupuesto. En el punto de mira estaba la nueva Lonestar por el tema de la humbucker del puente con coil tap, por eso de tener total versatilidad. Pero por supuesto, me recorrí todas las tiendas de Madrid junto con un amigo que sí se puede considerar buen conocedor de la Stratocaster, como guía y ayuda, y toqué no todos los modelos, pero sí una de cada gama desde las MIM hasta la American Standard, pasando por la controvertida American Special, que he de decir que me pareció también un guitarrón muy remendable, si ese es el estilo que se está buscando.
Como conclusión a mi inexperto análisis sobre todas las stratos que probé, diré que el precio no engaña, a más cara, mejor guitarra, y lo siento, pero es así. Hasta yo pude darme cuenta de eso. Si no hubiera tenido un presupuesto muy concreto, me hubiera comprado la Am Standard sí, o sí, se tocaba como mantequilla, el mástil es una pasada y del sonido qué voy a decir.
En el siguiente rango de precios, sobre 900 € ya optas a una Am Special, que como digo no es mala guitarra en absoluto, o ya a las series especiales MIM, como las Road Worn, la Deluxe Player, las classic player en nitrocelulosa, o la propia edición especial 60 aniversario de la Classic Player 50’s, la cual inicialmente no probé, porque no me llamaba la atención ni el rollo del aniversario, ni los complementos ni nada de eso, y pensaba que la diferencia de dinero estaría ahí. He de decir que mi presupuesto no llegaba a estas cifras, y me encontré con la disyuntiva de escoger alguna de las Deluxe o Classic Player por entorno a 700 – 750€ (por cierto, la Lonestar no la tenían en ningún sitio), las cuales tras probar cualquiera de las anteriores que he citado se quedaban un poco cortas, o esperar y seguir ahorrando para poder alcanzar a una de estas guitarras, llamémoslas “intermedias” entra las Deluxe y las MIA. Realmente creo que entre estas dos gamas hay un pequeño escalón de precio, y también lo hay en calidad, y se nota.
Total, y para no aburrir al personal, voy al grano. En un ninguna de las tiendas tenían la Classic Player 50’s, que era una de mis alternativas (parece que la 60’s es la que tiene demanda, según me dijeron), y no quería decidirme por ninguna otra hasta probar las pastillas American Vintage que monta este modelo, además de que estéticamente, en acabado sunburst y mástil de arce, me encanta. Así que cogí la 60th anniversary con el único objetivo de probar sus pastilla, y de repente, con el primer rasgeo, ¡algo sucedió! Parecía que el cuarto de pruebas se iluminaba de repente. Desenchufé la guitarra y la toqué a pelo (vengo de la guitarra clásica y me gusta escuchar la acústica pura de las quitarras, así desenchufadas), y quedé maravillado con la resonancia, la cantidad de armónicos que sonaban por todas partes, y de la calidad acústica global de esa guitarra. Ninguna otra de las que tenía por allí, o de las que ya había probado, había sonado así.
Y qué es eso que tiene esta guitarra en particular que la hace, no solo especial, sino realmente un instrumento con una relación calidad/precio fuera de lo común? Pues en mi ignorancia técnica sobre stratos en particular, el chico de la tienda, encantador, me explico el “truco”, y es ni más ni menos que el acabado en Nitrocelulosa, junto con una guitarra de buena calidad y muy bien construida, por supuesto. Me explicó un poco qué era eso de la nitrocelulosa, y que en la actualidad solo los modelos de muy alta gama la llevan. Yo puedo aseguraros que es una diferencia no solo notable, sino abismal, y cualquiera puede ir a una tienda y pedir una guitarra con este acabado y compararla con cualquier otra de similar nivel, claro, pero con otro acabado de los más habituales, normalmente poliéster.
Esta guitarra, así, desenchufada, con un mástil que tiene comodísimo y en general muy bien construida y acabada, dejó atrás a todas excepto quizás a la American Standard en cuanto al tacto y al mástil, que me enamoró. Una vez enchufada, y renunciando a mi idea de la humbucker en el puente, apreciamos un sonido stratocaster puro 100x100, super limpio, super brillante, redondo, con una dinámica genial y con cero ruido, ni siquiera con alta ganancia. La guitarra me conquistó, y no por su estética, la verdad, porque tanto dorado a mí se me atragantaba. Ahora tenía el problema del presupuesto, todo era empatizar con el vendedor, hablar un poquito de todo un poco, y que ésta fuera la última guitarra que tenían de esta serie limitada. Además, que fuera ya casi fin de año, y todo hay que decirlo, que la guitarra tuviera un pequeño arañazo inapreciable en un canto que me sirvió de argumento, me ayudó bastante a conseguir un precio que podía pagar. El trato estaba hecho, y la saqué por un precio que hacía de la ecuación Calidad/Precio algo realmente excepcional, comparando con los precios de las guitarras que llevaba tocando toda la mañana.
Además, la guitarra viene con un estuche tweed deluxe espectacular, súper bonito y bastante sólido, algo que no trae ninguna de las guitarras antes mencionadas, excepto ya la Am Standard. Solo esto ya cuesta una pasta!
Una vez con la guitarra de mi propiedad, ya solo me quedaba enorgullecerme de tener una edición especial, limitada, con alguna chorrada como el medallón conmemorativo, el libro exclusivo de la Stratocaster, etc. Algo que sin ser importante, después de todo le sumar valor.
Después de 4 meses con ella, no puedo estar más contento, me encanta tocarla por la noche, cuando todos en casa se han ido a la cama, desenchufada, con luz baja, y disfrutar de su increíble sonido acústico. Además la guitarra no se desafina nada, pero nada de nada, cero, con uso de tremolo y todo. El tema de los dorados lo solucioné rápido cambiando el golpeador original, que guardo impoluto, por uno blanco “parchment” que va muy bien con el blanco envejecido de los controles. Ahora parece una Reissue 56 de la custom shop, pero con las pastillas American Vintage 57/62, que son la caña, la verdad (quizás la del puente un poco chillona, pero esto ya va en gustos, o en ajuste, vete tu a saber).
En definitiva, no puedo estar más contento, y cuando las veo aún disponibles en algunas tiendas online donde las están ofreciendo a precio de liquidación, me dan ganas de ir a comprar otra!! Así que, si estáis en ese delicioso momento de buscar vuestra strato ideal, y os estáis volviendo locos con el tema MIM o MIA, que si hay diferencia, que si tal, os animo como poco a que busquéis y probéis esta guitarra antes de que se acaben. No os dejara indiferentes, y la compra siempre merecerá la pena.
Saludos
