Después de leerme -creo- que todo el post
, veo que, aunque por el camino han surgido un montón de interesantes debates (funcionarios, politicos, etc) , nos hemos alejado bastante del tema inicial, que era el desncanto que una generación (o varias) sienten respecto a sus expectativas iniciales.
Yo personalmente me considero una persona bastante feliz, principalmente porque no tengo unas aspiraciones demasiado elevadas, al menos en lo que a lo que con dinero puede comprarse. Ya estaba bastante al tanto de esa realidad, pero el confinamiento me lo ha confirmado: me basta con un libro, una guitarra o una peli el emule para ser feliz y no querer nada mas.
Entiendo que haya quien se sienta defraudado con lo que la vida le ha ido dando, y tengo amigos y conocidos que se lamentan de malas decisiones o simple mala suerte. Yo creo que no hay que dar por sentado que la vida nos deba algo, ni que nuestro esfuerzo siempre se verá recompensado. De hecho, una de mis grandes frustraciones fue y sigue siendo no dominar la guitarra como a mi me gustaría, por mas que meto horas y horas...