Como ya se ha comentado arriba, las pastillas son totalmente personalizadas y lo primero que te pregunta es cómo quieres sonar, qué tienes en mente, qué quieres conseguir. Este punto es complicado, porque explicar estas cosas nunca es fácil, pero os puedo asegurar que me ha captado a la primera. Además, una vez tienes las pastillas, si necesitas cambiar algo para aproximarte más a lo que buscabas, se puede hacer, por lo que tampoco te tiras a la piscina sin saber si tiene agua. En mi caso, ni siquiera ha sido necesario. A la primera ha dado en el clavo y me ha dado lo que buscaba jajaja.
La comunicación es excelente, trato amable y todo perfecto. No se puede pedir más. Como me comentó, está en proceso de hacer una nueva web y tener actualizado el facebook, por lo que puede que ahora mismo esté la cosa un poco a medias. Sin embargo, los pedidos y demás no tienen ningún problema ni atraso. Como os imaginaréis, es un taller pequeño y es difícil tener todo al día. Lo que sí tiene al día son los pedidos y los trabajos, que es lo más importante.
Para que os hagáis una idea, la guitarra donde las he puesto me encanta y le tengo mucho cariño, pero siempre estaba por ahí sobrevolando la sombra de venderla y buscar algo mejor. La guitarra es muy cómoda, pero era un poco plana en cuanto ha sonido. Pues con estas pastillas se ha convertido en una de mis guitarras principales. Ha recobrado la vida totalmente.
En fin, que os recomiendo al 100% Dogville. Hace unas pastillas de primer nivel a un precio más que justo y con un trato genial. En mi opinión, hay que apoyar este tipo de negocios. No se puede pedir más.
Os dejo una fotillo cutre para que veáis la pinta
Un saludo.