Saludos, guitarristas. Abro éste hilo con la intención de cambiar impresiones sobre éste modelo concreto de Les Paul. Creo que no existe ninguno ya creado en la web. Espero no equivocarme y que no acabe borrado. Quedan todos invitados a charlar sobre sus Traditionals o las de sus amigos.
Gibson Les Paul Traditional 2017 T.
Bien. Hace poco encontré la Les Paul que siempre quise. Resultó ser una Traditional de 2017, y si os parece bien, estreno el hilo comentando los pormenores de ésta adquisición. Vamos a ver lo bueno y lo malo, que de todo hay, aunque la balanza se inclina hacia lo positivo.
Ésta es la guitarra tal como se puede ver en las publicidades de Gibson:
Primer vistazo.
Lo primero que nos encontramos al verla en la tienda es que el famoso círculo con la leyenda "rhythm" / "treble" no sólo no viene en la guitarra, si no que para desilución de algunos esperanzados tampoco se ofrece entre los accesorios, para colocarlo si uno lo desea. Esto obligó a visitar otra tienda de la ciudad para adquirirlo por separado, ya que en la primera tampoco les quedaba casi ningún tipo de accesorio. Es un detalle sin el que no queda completa, para mi gusto, y Gibson ha decidido realizar todas las líneas 2017 y 2018 si él.
Pero subsanado éste mínimo inconveniente, así luce el instrumento en todo su esplendor. He procurado hacerle las fotos lo mejor posible con mi mini cámara:
Como ven, se trata de una Honeyburst de arce flameado AA. El vendedor de la tienda me comentaba que al recibir la guitarra, pensaron que los de Gibson se habían equivocado al calificarla, ya que luce impresionante y hermosa. Coincidí al primer vistazo.
La riqueza de matices que aparecen dependiendo de la luz y el ángulo de observación ya provee diversión antes siquiera de tocar las cuerdas. Esta imágen sirve de ejemplo, tratandose del mismo instrumento aunque no lo parezca:
Podemos observar también que cambié las perillas / potes de volumen y tono por unos Gibson de modelo diferente y que me gustan más. Destacar que los potenciómetros vienen equipados con punteros metálicos para referenciar la posición de actuación. Todo un detalle de agradecer. También se aprecia el puente ABR.
Recordemos que una de las carácterísticas de las Traditional es su cercanía, al menos en espíritu, a las Les Paul de los años 50, con sus ventajas e inconvenientes. Y los puentes ABR es verdad que pueden llegar a tener alguna pequeña limitación en la octavación. El cordal se anuncia como de aluminio niquelado, al igual que en aquellas primeras Les Paul.
En cuanto a la pala: el logo de Gibson va incrustado en madreperla y la tapa del tornillo del alma viene con el nombre del modelo. Éste será un detalle que cambiaré. Se me hace algo recargada con tanto texto. Puede parecer que la pala tiene una extraña textura, pero no es más que el reflejo de la pared de ladrillo que hay enfrente.
La cejuela es de nylon. Otro detalle anunciado como histórico de las primera épocas. Y en cuanto a las clavijas, son estilo vintage keystone. No son una maravilla, pero cumplen bien. No he notado graves problemas de afinación y estéticamente aportan otro detalle de clasicismo.
El número de serie (semi borrado con retoque fotográfico) indica en sus primeros dígitos el año de fabricación. Y ahí está el deseado grabado "made in USA" que tanta polémica genera con palabras como "marquitis", "pagar logo en la pala" y demás opiniones, je.
Podemos ver tambien el tono de la madera de caoba utilizada en su construcción. Hablaremos de eso.
Por la parte de atrás: tenemos un bloque de caoba en dos mitades. La unión de ambas está bastante lograda y a menos que se busque, no resulta demasiado evidente. Debo decir que el tono de acabado, muy natural, me encanta.
El peso. El mástil. Etc.
En cuanto a lo que a todo el mundo le interesa, el peso, lo medí con una báscula normalita y daba aproximadamente 3,5 kilos. Gibson declara que ésta Les Paul no tiene ningún alivio de peso. No hay cámaras, ni "modern relief" ni "queso suizo" (los 9 agujeros, je je). Y resulta francamente cómoda y ligera para mi. De hecho al sopesarla en la tienda me pareció sospechosamente ligera. Muy cercana a los 3,1 kilos de una Standard chambered (o semi-hueca, como me gusta definirlas) de 2009. Sólo 400 gramos de diferencia. Según Gibson, la madera empleada es caoba de baja densidad... Algún día le pasaré rayos X y saldremos de dudas.
El mástil, tiene perfil redondeado. Muy cómodo. Me resultó más agradable que el, por ejemplo, más chato de las Standard de 2008. También está construido en caoba y el diapasón es de palo rosa con binding hasta el extremo de los trastes (nibs).
Una ojeada al interior.
Dentro de la cavidad de electrónica, nos encontramos con dos condensadores, los célebres Orange Drop que, según opiniones, ayudan a obtener sonidos más clásicos. La verdad es que los controles de volumen meten bastante ruido en la posición media, aunque nada a tope o en niveles bajos. Y debo decir que por primera vez en la vida, estoy jugando con los controles de tono. Aportan realmente matices interesantes que antes yo no sabía apreciar.
[ Imagen no disponible ]
Pastillas (pickups) y sonido.
Las pastillas son Burstbucker I en mástil y Burstbucker II en puente. El material del imán es Alnico II y automáticamente las noté "gordas", con un sonido poderosamente rockero. Desgraciadamente, para tocar muchas de las cosas que toco se me quedan un pelín cortas. Estoy barajando hacerle un cambio en éste sentido. Pero en cuanto a calidad sonora, son inmaculadas. No sé si en ésto influye el bloque compacto de la guitarra, sin cámaras ni agujeros.
Estuche y accesorios.
La guitarra viene presentada en un bonito estuche rígido color marrón con herrajes dorados y peluche entre rojizo y burdeos en el interior. De fabricación Canadiense, tiene una mala terminación en uno de sus extremos y la tapa no encaja todo lo bien que debería. Y el compartimento para guardar accesorios es demasiado pequeño. Unos pocos centímetros más se agradecerian.
En cuanto a accesorios, no están nada mal. Lo primero que llama la atención es el protector de trastes con la pomposa leyenda "sólo una Gibson es lo suficientemente buena"...
El golpeador viene desmontado y con sus tornillos. Una idea que me encanta, pues soy más de look sin golpeador en las Les Paul. De modo que la guitarra no tiene agujeros para los tornillos y quien quiera montar la pieza deberá practicárselos.
Tenemos también una herramienta multi-usos con el logo de Gibson y en la que encontramos todas las llaves y destornilladores necesarios para tosas las piezas del instrumento.
Un paño suave de limpieza, una correa bastante normalita y las hojas de inspección de calidad firmadas por el técnico. Además de una foto de la propia guitarra en la mesa de inspección.
Este es un punto que quería comentar. No sé qué añadidos ofrecen otras marcas. Todas mis guitarras son de menos de mil euros y sólo ésta Traditional y la Standard que tengo sobrepasan esa cifra. Ninguna de las otras trae algo. A lo sumo alguna llave Allen. Ni un sólo papel. Nada.
En definitiva:
Para ir acabando: comentar que los enganches para la correa son de aluminio y más gordos de lo normal. Los veo tan efectivos, que a ésta no se los voy a cambiar por Schaller de seguridad. Me gusta su aspecto y la comodidad de uso.
Volviendo a la magnífica tapa de arce, en ésta foto de internet podemos ver el flameado bien de cerca:
En resumidas cuentas. Una Les Paul que siempre quise. Que se vea bien la madera. Tirando a rústica pero con un acabado a la nitrocelulosa perfecto. No muy pesada y con gran sonido. Ideal para rockear y blusear. Espero que sea mi Les Paul definitiva, y precisamente por eso va a recibir algunos pocos cambios que ya iré comentando por aquí.
¿Y tú? ¿Te animas a mostrarnos tu Traditional?
Gibson Les Paul Traditional 2017 T.
Bien. Hace poco encontré la Les Paul que siempre quise. Resultó ser una Traditional de 2017, y si os parece bien, estreno el hilo comentando los pormenores de ésta adquisición. Vamos a ver lo bueno y lo malo, que de todo hay, aunque la balanza se inclina hacia lo positivo.
Ésta es la guitarra tal como se puede ver en las publicidades de Gibson:
Primer vistazo.
Lo primero que nos encontramos al verla en la tienda es que el famoso círculo con la leyenda "rhythm" / "treble" no sólo no viene en la guitarra, si no que para desilución de algunos esperanzados tampoco se ofrece entre los accesorios, para colocarlo si uno lo desea. Esto obligó a visitar otra tienda de la ciudad para adquirirlo por separado, ya que en la primera tampoco les quedaba casi ningún tipo de accesorio. Es un detalle sin el que no queda completa, para mi gusto, y Gibson ha decidido realizar todas las líneas 2017 y 2018 si él.
Pero subsanado éste mínimo inconveniente, así luce el instrumento en todo su esplendor. He procurado hacerle las fotos lo mejor posible con mi mini cámara:
Como ven, se trata de una Honeyburst de arce flameado AA. El vendedor de la tienda me comentaba que al recibir la guitarra, pensaron que los de Gibson se habían equivocado al calificarla, ya que luce impresionante y hermosa. Coincidí al primer vistazo.
La riqueza de matices que aparecen dependiendo de la luz y el ángulo de observación ya provee diversión antes siquiera de tocar las cuerdas. Esta imágen sirve de ejemplo, tratandose del mismo instrumento aunque no lo parezca:
Podemos observar también que cambié las perillas / potes de volumen y tono por unos Gibson de modelo diferente y que me gustan más. Destacar que los potenciómetros vienen equipados con punteros metálicos para referenciar la posición de actuación. Todo un detalle de agradecer. También se aprecia el puente ABR.
Recordemos que una de las carácterísticas de las Traditional es su cercanía, al menos en espíritu, a las Les Paul de los años 50, con sus ventajas e inconvenientes. Y los puentes ABR es verdad que pueden llegar a tener alguna pequeña limitación en la octavación. El cordal se anuncia como de aluminio niquelado, al igual que en aquellas primeras Les Paul.
En cuanto a la pala: el logo de Gibson va incrustado en madreperla y la tapa del tornillo del alma viene con el nombre del modelo. Éste será un detalle que cambiaré. Se me hace algo recargada con tanto texto. Puede parecer que la pala tiene una extraña textura, pero no es más que el reflejo de la pared de ladrillo que hay enfrente.
La cejuela es de nylon. Otro detalle anunciado como histórico de las primera épocas. Y en cuanto a las clavijas, son estilo vintage keystone. No son una maravilla, pero cumplen bien. No he notado graves problemas de afinación y estéticamente aportan otro detalle de clasicismo.
El número de serie (semi borrado con retoque fotográfico) indica en sus primeros dígitos el año de fabricación. Y ahí está el deseado grabado "made in USA" que tanta polémica genera con palabras como "marquitis", "pagar logo en la pala" y demás opiniones, je.
Podemos ver tambien el tono de la madera de caoba utilizada en su construcción. Hablaremos de eso.
Por la parte de atrás: tenemos un bloque de caoba en dos mitades. La unión de ambas está bastante lograda y a menos que se busque, no resulta demasiado evidente. Debo decir que el tono de acabado, muy natural, me encanta.
El peso. El mástil. Etc.
En cuanto a lo que a todo el mundo le interesa, el peso, lo medí con una báscula normalita y daba aproximadamente 3,5 kilos. Gibson declara que ésta Les Paul no tiene ningún alivio de peso. No hay cámaras, ni "modern relief" ni "queso suizo" (los 9 agujeros, je je). Y resulta francamente cómoda y ligera para mi. De hecho al sopesarla en la tienda me pareció sospechosamente ligera. Muy cercana a los 3,1 kilos de una Standard chambered (o semi-hueca, como me gusta definirlas) de 2009. Sólo 400 gramos de diferencia. Según Gibson, la madera empleada es caoba de baja densidad... Algún día le pasaré rayos X y saldremos de dudas.
El mástil, tiene perfil redondeado. Muy cómodo. Me resultó más agradable que el, por ejemplo, más chato de las Standard de 2008. También está construido en caoba y el diapasón es de palo rosa con binding hasta el extremo de los trastes (nibs).
Una ojeada al interior.
Dentro de la cavidad de electrónica, nos encontramos con dos condensadores, los célebres Orange Drop que, según opiniones, ayudan a obtener sonidos más clásicos. La verdad es que los controles de volumen meten bastante ruido en la posición media, aunque nada a tope o en niveles bajos. Y debo decir que por primera vez en la vida, estoy jugando con los controles de tono. Aportan realmente matices interesantes que antes yo no sabía apreciar.
[ Imagen no disponible ]
Pastillas (pickups) y sonido.
Las pastillas son Burstbucker I en mástil y Burstbucker II en puente. El material del imán es Alnico II y automáticamente las noté "gordas", con un sonido poderosamente rockero. Desgraciadamente, para tocar muchas de las cosas que toco se me quedan un pelín cortas. Estoy barajando hacerle un cambio en éste sentido. Pero en cuanto a calidad sonora, son inmaculadas. No sé si en ésto influye el bloque compacto de la guitarra, sin cámaras ni agujeros.
Estuche y accesorios.
La guitarra viene presentada en un bonito estuche rígido color marrón con herrajes dorados y peluche entre rojizo y burdeos en el interior. De fabricación Canadiense, tiene una mala terminación en uno de sus extremos y la tapa no encaja todo lo bien que debería. Y el compartimento para guardar accesorios es demasiado pequeño. Unos pocos centímetros más se agradecerian.
En cuanto a accesorios, no están nada mal. Lo primero que llama la atención es el protector de trastes con la pomposa leyenda "sólo una Gibson es lo suficientemente buena"...
El golpeador viene desmontado y con sus tornillos. Una idea que me encanta, pues soy más de look sin golpeador en las Les Paul. De modo que la guitarra no tiene agujeros para los tornillos y quien quiera montar la pieza deberá practicárselos.
Tenemos también una herramienta multi-usos con el logo de Gibson y en la que encontramos todas las llaves y destornilladores necesarios para tosas las piezas del instrumento.
Un paño suave de limpieza, una correa bastante normalita y las hojas de inspección de calidad firmadas por el técnico. Además de una foto de la propia guitarra en la mesa de inspección.
Este es un punto que quería comentar. No sé qué añadidos ofrecen otras marcas. Todas mis guitarras son de menos de mil euros y sólo ésta Traditional y la Standard que tengo sobrepasan esa cifra. Ninguna de las otras trae algo. A lo sumo alguna llave Allen. Ni un sólo papel. Nada.
En definitiva:
Para ir acabando: comentar que los enganches para la correa son de aluminio y más gordos de lo normal. Los veo tan efectivos, que a ésta no se los voy a cambiar por Schaller de seguridad. Me gusta su aspecto y la comodidad de uso.
Volviendo a la magnífica tapa de arce, en ésta foto de internet podemos ver el flameado bien de cerca:
En resumidas cuentas. Una Les Paul que siempre quise. Que se vea bien la madera. Tirando a rústica pero con un acabado a la nitrocelulosa perfecto. No muy pesada y con gran sonido. Ideal para rockear y blusear. Espero que sea mi Les Paul definitiva, y precisamente por eso va a recibir algunos pocos cambios que ya iré comentando por aquí.
¿Y tú? ¿Te animas a mostrarnos tu Traditional?