Eso se lo hicieron a mi padre en la rodilla, y son como calambrazos, que no duelen, pero es como si te tomases 2 tazas de cafe cargadas en un segundo. Te quedas con cara de: hostias! Vaya calambrazo!
Pero una birrita en vaso pequeño, que tampoco le vamos a meter ahora una jarra vikinga al brazo!!