Habiendo leído atentamente vuestros argumentos, entiendo la postura de algunos que justifican que se sigan haciendo envíos porque mantiene empleos. Me parece razonable y lógico que se piense así, pero expondré otro argumento.
Quería aportar algo acerca de lo que se dice de los contagios en Correos y los EPIs.
Los contagios se producen mucho más persona a persona y mejor aún en espacios cerrados y en "distancias cortas", por así decirlo.
Ya sé que el puñetero virus permanece en superficies "X" tiempo, pero lo que realmente funciona es el contacto cercano interpersonal: hablar, darse la mano, tocarse, toser al lado de otros, estornudar y toser en la mano y luego que está vaya "al pan" que tocan otros casi inmediatamente...
¿Van a trabajar con un EPI desde que llegan a la oficina hasta que salen para su casa? ¿Saben cómo se coloca y qué no deben hacer nunca para que lo que queda en la parte externa del traje no se lo lleven a su cuerpo? ¿Tienen capacidad para trabajar con eso puesto y poder desecharlo con total seguridad?
Porque los sanitarios tenemos todos esos problemas, no creáis. Yo desarrollé la enfermedad hasta su segunda fase, la neumonia bilateral. Doy gracias por que quedase en un sustazo y no acabara sedado e intubado como unos cuantos de mi edad. Que para nada la mayoría de las UVIs tienen todo personas de más de 70 años.
La mayoría de contagios en Correos es mucho más probable que se produzcan porque los trabajadores acuden aún mismo lugar y no usan mascarillas, que si que reducen la expansión de microorganismos por gotas de Flügge, esto es, las que salen SIEMPRE cuando hablamos, estornudamos o tosemos, y que en caso de estar contagiado son vehículos para el virus.
Todos sabréis ya que cuando uno se encuentra perfectamente, antes de comenzar síntoma alguno, YA SE ESTÁ SIENDO INFECTIVO, osea, que repartes bichos a tu entorno inmediato sin enterarte, puesto que estás "sano como una manzana porque eres joven y eso le pasa solo a los viejos".
Puedes estar así varios días, aún no se sabe con certeza. Por tanto, hasta que empiezas con la tos, la febricula o lo que sea que empieces a notarte enfermo, ya has estado contagiando a otros en tu trabajo.
Eso se reduce significativamente con la distancia entre personas, la higiene adecuada de superficies y manos (nos pasamos el día tocándonos la cara, pero también la superficie externa de la mascarilla, incluso lo habréis visto en sanitarios. Los hábitos casi inconscientes son muy difíciles de cambiar...)
Para terminar: temo por lo que va a suceder a partir dela vuelta al trabajo de este lunes. Veremos con mucha probabilidad un aumento paulatino y significativo de los enfermos confirmados a partir de la semana siguiente, y las otras aún más.
Ojalá la enorme mayoría sean leves.
Mucha salud, fuerza y cuidaos!
Y mucho rocanrol!!!