Sandman escribió:
que te veo ya dando golpecitos a los árboles de los bosques de al lado de tu casa buscando una víctima...
Lamentablemente vivo en una selva de cemento.
De niño tallaba todo tipo de vehículo de madera, pero si conocí las maderas a fondo cuando viví en Santiago de Chile entre 2005 y 2012
Revalidé mi tÍtulo de arquitecto para trabajar alli donde gran parte de la construcción se hace en madera, A diferencia del Rio de la Plata y la ciudad de Montevideo donde nací y donde se seguía la tradición constructiva mediterránea del ladrillo y la estructura de hormigón armado, en Chile hay mucha madera provenientes de sus bosques.
Con cinco años de cálculo de estructura y una parte dedicada a las estructuras de madera me aventuré a construir en madera varias viviendas recicladas y cuando ocurrió el terremoto en el año 2010 las maderas antiguas de demolición estaban botadas por las calles y con un equipo de construcción, las recogimos, cargamos, limpiamos, retiramos clavos, clasificamos y las recuperamos., ordenándolas en una bodega. y no daba a basto el espacio. ( mi espalda uff)
No les daba golpes , ni las enviaba a laboratorio, pero si vi muchas variedades, distintas flexibilidades, resistencia al corte y a los nuevos clavos y tornillos
Algunas eran como piedra. Mara, Rauli, Lenga, Mañio Roble, Pino Oregón, Cedro, Pino radiata, de todo un poco, Muchas de las especies ya casi extintas o extintas.
Si es cierto para mi que a una muestra tan pequeña como para un mástil no vale la pena enviar a un laboratorio y con tan solo tenerla entre las manos, ver las vetas, sentirle el peso y darle un golpe de nudillo te das cuenta si es dura y resistente no.
Claro que también se puede tratar de punzar en una parte que no vas a usar y ver si queda la marca o no, de hecho al serruchar manualmente o lijar se nota también,
Los tablones y tablas se evidenciaban al acopiar, algunas maderas se doblaban en el aire y vibraban como parche de bateria y otras eran como piedra de tan duras. Lo increíble era la rectitud de algunas maderas de cien años o más,
No me quedé con ninguna lamentablemente, pero al pulirlas veía vetas bellísimas en algunos casos.
Trabajar en la reconstrucción fue bastante reconfortante al menos salvando esas maderas,