#1 Bueno amigo te daré mi remedio, tal vez te sirva (a mi y a otros nos ha servido) para no tener esa maldita enfermedad llamada G.A.S. que realmente es una patología que lleva a las personas a una oscura necesidad de acumular "objetos" compulsivamente, a esto se le conoce como "siglomanía".
Mis conocidos dicen que yo no tengo G.A.S. porque me crié entre instrumentos musicales (mi padre, que en paz descanse, tenía una tienda) y que desde niño me acostumbré a vivir entre guitarras, amplificadores, etc. Pero eso no es así.
Verás amigo, las guitarras son como las mujeres (con sus cosas buenas y con sus cosas malas). ¿Por qué anhelas el conocer las intimidades de las mujeres de tus prójimos? Para no desear a otra mujer, lo que un hombre debe hacer es estar muy enamorado de su hembra. Por eso, tu chica tiene que ser muy especial... única!!!
Te pondré un ejemplo. Si tú, desde tu tierna adolescencia, siempre has deseado una Gibson Les Paul Custom Shop 59, adelante, no dudes en gastarte 4000, 5000 o 6000 € en la guitarra de tu vida, porque esa guitarra saciará todas tus aspiraciones, poseerá tu alma eternamente como si se tratase de una maldición y colmará todas tus ansias... ya no desearás otra guitarra. Lo peor que un guitarrista puede hacer es amar, por encima de su propia vida, una determinada guitarra y comprar otra de una gama más baja o de una "marca imitadora", porque jamás estará satisfecho. Ese es el gran secreto que sólo saben los fabricantes (los grandes alquimistas que inventaron las diabólicas gamas medias, bajas y, también, el marketing) y los vendedores, pero que el consumidor jamás conocerá. Serás de por vida un cruzado en Tierra Santa... siempre buscando el Santo Grial. Una guitarra especial, única, estará unida a ti por muchos años, mientras una guitarra "normal" durará muy poco tiempo a tu lado, ya que la venderás para comprar otra... buscando por siempre algo mejor.
Verás amigo, es mejor (créeme) tener sólo dos guitarras y que sean tu sueño húmedo hecho realidad, que tener 10 guitarras que te dejen constantemente insatisfecho. Con esas otras 10 guitarras jamás te sentirás un hombre de verdad (RECUERDA QUE UNA GUITARRA ES IGUAL QUE UNA MUJER).
Espero te sirva mi consejo, si no, hay médicos que te pueden ayudar. Un fuerte abrazo