Buenas!
Vaya por delante que no tengo muchos conocimientos a nivel técnico sobre el diseño de pastillas. Simplemente me guío por lo que escucho como todo guitarrista corriente Sin embargo, e igual que os pasará a muchos, tengo ciertos prejucios (ideas a priori, no digo que sean malas) sobre cómo suenan determinadas pastillas, muchas veces ayudado también por las especificaciones del fabricante (el gráfico de EQ de DiMarzio o el pico de resonancia de Seymour Duncan, por ejemplo). Con esa referencia y la experiencia de haber probado bastantes pastillas, sueles hacerte un esquema mental de qué pastillas van bien en qué maderas y para qué estilos.
Bueno, pues aunque esto a veces ayuda, recientemente he comprobado una vez más que por muchas pastillas que hayas probado y muchas referencias a priori que tengas, te puedes equivocar de lleno en la elección.
Todos hemos dicho alguna vez: "La pastilla depende de la madera de la guitarra en la que la quieras poner". Y es cierto. Pero normalmente el razonamiento es: "Si tengo una guitarra que da muchos graves, una pastilla con muchos agudos le irá bien y viceversa". Pues en mi humilde experiencia, esto no siempre se cumple, o al menos no como yo pensaba (quizá erróneamente).
Hace poco adquirí una Schecter Banshee 7. Cuerpo de aliso y tapa de arce, mástil de arce y 26,5" de escala. Así que pensé, bueno, está claro que una DiMarzio CrunchLab 7 le vendrá de perlas: Specs -> http://www.dimarzio.com/pickups/7-string/crunch-lab-7
Y sí, al principio me convencía. Sonaba bastante equilibrada. Sin embargo había dos cosas que me escamaban:
1º No tenía la respuesta en graves a la que estaba acostumbrado con la Crunch Lab. He probado esta pastilla hasta la saciedad en caoba y tilo desde el año en que salió (2009) hasta ahora y una da sus características siempre ha sido su respuesta en graves.
2º Los armónicos (no los artificiales, sino los armónicos propios de cada nota) daban la sensación de estar "descontrolados". No sé muy bien cómo explicar esto. No sé si es que la pastilla potenciaba demasiado ciertas frecuencias medias o yo que sé, pero esas frecuencias sonaban algo embarradas en algunos presets.
Decidí probar otras pastillas. Expliqué a DiMarzio mi problema y les pregunté si la Tone Zone (más graves!) sería una buena solución. Sin embargo su respuesta me dejó helado. Me dijeron que la mejor opción era una Evolution 7 (mi esquema mental de pastillas se hizo añicos). Vamos a ver, el sentir general (y el mío propio habiéndola probado hacía tiempo) es que la Evolution 7 es una pastilla aguda (no tanto como la Evolution 6). No me cuadraba esa respuesta. ¿Cómo iba a ser la solución?
Bueno, pues les hice caso. Puse la Evo7 y resultó que llevaban razón. Sí, es una pastilla aguda, pero resulta que en esta guitarra su respuesta en graves es mejor que la CL7. ¿Por qué? Ni idea. Sí, la CL7 suena más oscura, pero eso no significa que responda mejor en frecuencias graves. También solucionó el tema de los armónicos. Quizá porque el pico de respuesta no está en esa frecuencia que los provocaba. Como decía al principio, la explicación técnica a todo esto es un enigma para mí, pero viendo el gráfico de EQ de la Evo7 quizá tiene sentido que le den un valor más alto a las frecuencias graves (bass 6.5 | mid 7 | treble 6.5) que en la CL7 (bass 6 | mid 5.5 | treble 4.5).
En fin, quizá a alguien que tenga más conocimientos técnicos al respecto le puede parecer obvio todo lo que estoy diciendo, pero a mí me ha dejado bastante sorprendido. Es evidente que la madera y la construcción de la guitarra determina lo bien o mal que le va una pastilla, pero me da la sensación de que esas definiciones de "aguda" o "grave" que les asignamos dogmáticamente a ciertas maderas o pastillas no siempre se cumplen. También puede ser que esté equivocado y todo esto tenga que ver más con psicoacústica Pero en principio creo que no.
Para terminar, aunque no sea muy descriptivo, os dejo dos grabaciones. Una con la Evo7 y otra con la CL7. Son mezclas completas, por lo que no creo que se termine de ver lo que digo, pero bueno, algo se nota.
Vaya por delante que no tengo muchos conocimientos a nivel técnico sobre el diseño de pastillas. Simplemente me guío por lo que escucho como todo guitarrista corriente Sin embargo, e igual que os pasará a muchos, tengo ciertos prejucios (ideas a priori, no digo que sean malas) sobre cómo suenan determinadas pastillas, muchas veces ayudado también por las especificaciones del fabricante (el gráfico de EQ de DiMarzio o el pico de resonancia de Seymour Duncan, por ejemplo). Con esa referencia y la experiencia de haber probado bastantes pastillas, sueles hacerte un esquema mental de qué pastillas van bien en qué maderas y para qué estilos.
Bueno, pues aunque esto a veces ayuda, recientemente he comprobado una vez más que por muchas pastillas que hayas probado y muchas referencias a priori que tengas, te puedes equivocar de lleno en la elección.
Todos hemos dicho alguna vez: "La pastilla depende de la madera de la guitarra en la que la quieras poner". Y es cierto. Pero normalmente el razonamiento es: "Si tengo una guitarra que da muchos graves, una pastilla con muchos agudos le irá bien y viceversa". Pues en mi humilde experiencia, esto no siempre se cumple, o al menos no como yo pensaba (quizá erróneamente).
Hace poco adquirí una Schecter Banshee 7. Cuerpo de aliso y tapa de arce, mástil de arce y 26,5" de escala. Así que pensé, bueno, está claro que una DiMarzio CrunchLab 7 le vendrá de perlas: Specs -> http://www.dimarzio.com/pickups/7-string/crunch-lab-7
Y sí, al principio me convencía. Sonaba bastante equilibrada. Sin embargo había dos cosas que me escamaban:
1º No tenía la respuesta en graves a la que estaba acostumbrado con la Crunch Lab. He probado esta pastilla hasta la saciedad en caoba y tilo desde el año en que salió (2009) hasta ahora y una da sus características siempre ha sido su respuesta en graves.
2º Los armónicos (no los artificiales, sino los armónicos propios de cada nota) daban la sensación de estar "descontrolados". No sé muy bien cómo explicar esto. No sé si es que la pastilla potenciaba demasiado ciertas frecuencias medias o yo que sé, pero esas frecuencias sonaban algo embarradas en algunos presets.
Decidí probar otras pastillas. Expliqué a DiMarzio mi problema y les pregunté si la Tone Zone (más graves!) sería una buena solución. Sin embargo su respuesta me dejó helado. Me dijeron que la mejor opción era una Evolution 7 (mi esquema mental de pastillas se hizo añicos). Vamos a ver, el sentir general (y el mío propio habiéndola probado hacía tiempo) es que la Evolution 7 es una pastilla aguda (no tanto como la Evolution 6). No me cuadraba esa respuesta. ¿Cómo iba a ser la solución?
Bueno, pues les hice caso. Puse la Evo7 y resultó que llevaban razón. Sí, es una pastilla aguda, pero resulta que en esta guitarra su respuesta en graves es mejor que la CL7. ¿Por qué? Ni idea. Sí, la CL7 suena más oscura, pero eso no significa que responda mejor en frecuencias graves. También solucionó el tema de los armónicos. Quizá porque el pico de respuesta no está en esa frecuencia que los provocaba. Como decía al principio, la explicación técnica a todo esto es un enigma para mí, pero viendo el gráfico de EQ de la Evo7 quizá tiene sentido que le den un valor más alto a las frecuencias graves (bass 6.5 | mid 7 | treble 6.5) que en la CL7 (bass 6 | mid 5.5 | treble 4.5).
En fin, quizá a alguien que tenga más conocimientos técnicos al respecto le puede parecer obvio todo lo que estoy diciendo, pero a mí me ha dejado bastante sorprendido. Es evidente que la madera y la construcción de la guitarra determina lo bien o mal que le va una pastilla, pero me da la sensación de que esas definiciones de "aguda" o "grave" que les asignamos dogmáticamente a ciertas maderas o pastillas no siempre se cumplen. También puede ser que esté equivocado y todo esto tenga que ver más con psicoacústica Pero en principio creo que no.
Para terminar, aunque no sea muy descriptivo, os dejo dos grabaciones. Una con la Evo7 y otra con la CL7. Son mezclas completas, por lo que no creo que se termine de ver lo que digo, pero bueno, algo se nota.