Desde que tengo uso de razón, recuerdo a los guitarristas preguntándonos por las verdaderas diferencias entre unas versiones de Stratocaster y otras que doblan o triplican su precio. Expertos, enterados y enteradillos intentan explicarnos estas diferencias, pero parecen no ponerse de acuerdo: que si el número de piezas de madera del cuerpo, que si la calidad de componentes y maderas, que si el control de calidad, que si la pintura, que si la curación de las maderas...
Con respecto a la calidad de los componentes, para la industria moderna ¿tiene sentido fabricar 50000 selectores de pastilla de calidad media y 50000 selectores de calidad alta? Casi siempre es más rentable fabricar 100000 selectores de buena calidad... A no ser que instalando componentes de mala calidad pretendas justificar una diferencia de precio entre guitarras del 100% o más. Leí en algún sitio que HP fabricaba impresoras baratas y caras. La única diferencia real entre ambas era que en las primeras instalaba un chip que las hacía más lentas que las impresoras “buenas”. ¿Véis por dónde voy?
Curiosamente, Fender guarda silencio sepulcral sobre las verdaderas diferencias entre, por ejemplo, las guitarras Mex y las USA. ¿Por qué? ¿No sería lógico explicar detenidamente las características de los modelos más caros? Cada guitarra tiene su cliente, así que cada guitarrista podría valorar si las diferencias de precio justifican o no su inversión.
De igual modo que Mercadona o Carrefour no explica las diferencias entre las leches “de marca” caras y las baratas de marca blanca, mi tesis es que Fender no explica estas diferencias porque no las hay. O al menos, no justifican esas diferencias de precio. Creo que este hermetismo de la marca alimenta el fetichismo y el razonamiento: “si cuesta el doble, pues sonará mejor, digo yo...”. Esto explicaría porqué Fender no da detalles de porqué una Vintage Hot Rod cuesta 2,5 veces más que una Classic Player.
