Y dónde se puede ver ese documental?
#27
La ARRADIO!
Son grabaciones de la época que emitían, pero sin la música!! Vamos que puedes escuchar que algo vale 50 talegos o 50.000 pelas.
¿Sabíais que a Dalí le gustaba follarse un pato recién decapitado y que nunca cató hembra (humana)?
Yo soy madrileño, y sin embargo pienso que en aquellos años lo bueno estaba más al norte, Euskadi, Barcelona. Y los grupos madrileños que sí me gustan, no están incluidos.
Tampoco me olvido de los andaluces, imprescindibles, Triana por ejemplo.
Yo lo llamaría La Moñada Madrileña. Lo más domesticado, lo más inocuo para la convulsa política de la época, lo menos contestatario. La caña la metían los punkies vascos.
Al hilo de los últimos mensajes: que un artista venga de una familia acomodada y que se pudiera permitir clases de música no solo influye en la calidad de la obra, también es política. Al igual que pueda permitirse no trabajar para ir a un local a ensayar todos los días porque no tiene que trabajar, o no en algo físico. Y también que pueda salir todas las semanas a los locales de moda donde hacer contactos. Todo eso influye, en menor o mayor medida (para mí es algo importante), en el éxito posterior que pueda conseguir, y más en una época como esa. Si estamos hablando de que la propia familia de miembros de Tequila eran migrantes argentinos que huían de la dictadura y España venía de lo mismo, cómo no va a ser eso política. Por no hablar de que sabemos cómo han acabado luego músicos como Alaska o Fabio McNamara. Ya está, solo quería puntualizar eso como opinión personal. El documental tiene buena pinta, por cierto.
#33 Aunque tiene sentido lo que comentas, yo no lo comparto al completo, o más bien lo matizaría. No creo que sea por tener más tiempo. Pienso que el que tiene una vocación fuerte, venga de donde venga, y tenga el tiempo que tenga, hace el máximo para sacar tiempo, expresarse, hacer canciones o lo que sea.
Ya no se da el caso, pero hubo unos tiempos en los que la sensibilidad artística y la cultura musical estaba más vinculada a la clase social. Pero hoy ya, estando todo al alcance de todos, el que no toca el piano es porque no quiere.
Por ejemplo, sería lógico que personas como Diana Krall o Norah Jones procedan de familias con mayor sensibilidad artística que los Ramones o Lemmy Kilmister. Pero no es una regla de oro, cada vez menos.