Mi opinión: ahora mismo tienes equipo de sobra para tocar cualquier género. De hecho, posiblemente tu equipo sea demasiado bueno para hacer punk
. Yo he pasado por usar muchos efectos, y en los últimos años simplemente he tocado con el bajo enchufado al ampli, y es lo que mejor me suena.
Lo importante, para mí, va en este orden: bajista > bajo > ampli > efectos (opcional). Cuando los efectos toman demasiado protagonismo en el bajo, puede no encajar bien con el resto de la banda.
Dicho esto, casi todos los bajistas recomiendan el uso de un compresor. A mí me parece bastante prescindible. Su objetivo es "nivelar" el volumen de tu señal: a grandes rasgos subirte el volumen cuando te quedas corto, y bajártelo cuando te pasas. Esto hace que tu volumen sea muy homogéneo, lo cual está muy bien para rock y similares. Pero, ¿es necesario? Si tu técnica es buena y ya tienes pegada "de serie", no. Otra cosa es que uses técnicas que, aunque bien ejecutadas, tengan poco volumen (tapping, por ejemplo), pero no creo que lo apliques mucho en tus géneros.
También puede ser interesante un fuzz o una distorsión para géneros más cañeros, pero yo no la veo necesaria por 2 motivos:
- Este tipo de efectos suele hacerte ganar agudos, pero perder graves (o simplemente dejarlos igual, con lo que en comparación con los agudos que nos aporta parece que perdemos graves).
- Tienes un SVT. Tienes el ampli de válvulas más molón posible para bajo: ¿por qué no sacar directamente de ahí la saturación?
Luego ya tienes cosas más o menos marcianas, pero difíciles de integrar. Con chorus sonarás a GnR (que no es malo, ojo, sólo que todo el mundo te identificará con esto), y flangers, phasers y trémolos se hacen duritos en cuanto intentas empastar con otros músicos.
Bueno, ahí va mi experiencia, que es claramente discutible. Espero que te sirva.
