Segunda mano de primer ayer por la tarde:
Esta vez se me hizo más complicado. Hacía algo de viento, y entre el miedo a que le cayera alguna mota de porquería y querer cubrir bien del todo, le di más pasadas de lo debido. Quedaron algunos chorretones que tuve que igualar luego con el lijado, llegando a descubrir la madera en algún punto. Así que a esperar a que me llegue más primer para darle una tercera mano y dejarla niquelada.
Como estar parado no se me da bien y mañana viene lluvia ya para unos días, me he puesto con el gold top. Hay que cubrir bien toda la guitarra ya que las partículas doradas vuelan por todas partes. Para ser a spray de 400ml y en un balcón ha quedado bastante digna:
Si no tenéis que lidiar con el viento, las prisas por el clima que supone tener que desmontar el chiringuito del balcón, o cualquier otra adversidad, dar pasadas finas. Mejor varias y finas que pocas y copiosas. Los colores metalizados son jodidos ya que si das pasadas densas, cualquier chorreton te hace "olas" que cantarían un huevo. Por otro lado, pide bastantes manos hasta cubrir por completo la beta del arce y dejar un dorado uniforme. Así que ante el peligro de "chorretones", la he terminado tumbada en horizontal. El resultado:
Dadas las circunstancias, y con los recursos que tengo, me doy con un canto en los dientes. Poco a poco se va acercando el aspecto final.
Esta vez se me hizo más complicado. Hacía algo de viento, y entre el miedo a que le cayera alguna mota de porquería y querer cubrir bien del todo, le di más pasadas de lo debido. Quedaron algunos chorretones que tuve que igualar luego con el lijado, llegando a descubrir la madera en algún punto. Así que a esperar a que me llegue más primer para darle una tercera mano y dejarla niquelada.
Como estar parado no se me da bien y mañana viene lluvia ya para unos días, me he puesto con el gold top. Hay que cubrir bien toda la guitarra ya que las partículas doradas vuelan por todas partes. Para ser a spray de 400ml y en un balcón ha quedado bastante digna:
Si no tenéis que lidiar con el viento, las prisas por el clima que supone tener que desmontar el chiringuito del balcón, o cualquier otra adversidad, dar pasadas finas. Mejor varias y finas que pocas y copiosas. Los colores metalizados son jodidos ya que si das pasadas densas, cualquier chorreton te hace "olas" que cantarían un huevo. Por otro lado, pide bastantes manos hasta cubrir por completo la beta del arce y dejar un dorado uniforme. Así que ante el peligro de "chorretones", la he terminado tumbada en horizontal. El resultado:
Dadas las circunstancias, y con los recursos que tengo, me doy con un canto en los dientes. Poco a poco se va acercando el aspecto final.