En la improvisación hay dos partes fundamentales:
- La parte más técnica, que es la que te va a permitir tocar con la mayor precisión posible las ideas que te puedan ir pasando por la cabeza.
- La parte creativa, en la que te vienen unas u otras ideas en función de lo desarrollado que tengas tu fraseo.
En mi opinión, creo que la parte técnica es la que primero hay que trabajar hasta lograr ese cometido. Una vez que lo consigues, ya se puede ver qué es lo que está fallando en la parte creativa.
Para comprobar si realmente tienes o no dificultades para llevar lo que está en tu cabeza a tu instrumento, lo mejor es que te pongas una lista de temas melódicos y trates de imitarlos, de primeras y sin más intentos, con la guitarra. En ese aspecto, no importa si las ideas proceden de algo que ya has oido o si provienen de tu imaginación; la cuestión es que puedas ejecutarlas sin problemas.
Pero por lo que comentas, entiendo que las cuestiones técnicas ya las tienes superadas y que estás encontrando dificultades en la parte creativa.
Federico Leguizamon escribió:
Muchos me dicen que escuche mucha musica,y creanme que lo hago,escucho varios generos.hasta lo que estan fuera de mi gusto.
Puede que eso no sea suficiente. No sirve de nada escuchar mucha música si no sabes en qué fijarte para aprender de ello.
Yo te propongo que te grabes improvisando. Luego escuches a guitarristas u otros músicos que te gusten por su fraseo. Debes comparar lo que hacen ellos y lo que haces tú y tienes que ser capaz de concretar que es lo que te falla o falta en comparación con ellos. En ese sentido te puedes fijar en muchas cosas:
- Variabilidad interválica (como mezclan y combinan intervalos de 2ª, 3ª, 4ª, 5ª....).
- Variabilidad rítmica (combinación de diferentes figuras musicales -blancas, corcheas, tresillos, semicorcheas...- y sus correspondientes silencios)
- Resolución de los fraseos (si resuelven sobre la fundamental del acorde, sobre la 3ª, 5ª...)
- Uso de diferentes técnicas de matización (vibratos, bendings, armónicos, ligados...)
- Utilización de notas cromáticas (fuera de tonalidad, si es música tonal, claro...)
- Empleo de diferentes adornos rítmicos, como retardos, contratiempos, anticipaciones, síncopas...
- Variablidad tímbrica, que se puede modificar con los controles de volumen, tono, selector de pastillas, efectos, ecualizaciones...
Una vez detectados los problemas o carencias, lo suyo es ir abordando cada uno de ellos, empezando por el que consideres que peor está. Te concentras exclusivamente en él cuando te pongas a practicar improvisación y poco a poco deberías ir mejorándolo. Una vez solventada esa carencia, a por otra...