Tocar, se puede decir que "toco" la guitarra. Es uno de mis hobbies. No soy muy bueno, pero me lo paso bien y, oye, algún solo de Adrian Smith estoy digiriéndolo a velocidad completa. Digamos que voy mejorando. He dado clases y voy a volver a darlas, tengo mi multiefectos y voy experimentando, etc.
El tema es que me ha entrado un ataque de GAS de inusitada fuerza. Me he encaprichado de una guitarra semi-custom que, entre pitos, flautas, un inlay personalizado, maletita y envío, se me queda en unos 2.000 euros. Una Ran Crusher FF8 por cierto.
No sé qué opináis al respecto, aparte de que cada uno lógicamente se gasta la pasta en lo que quiera. ¿Lo véis una locura? No sé si realmente tocaré más horas a la semana por tenerla (al principio sí), pero me apetece poseer el objeto en sí.
A ratos estoy que la compraba en el acto, a ratos me digo "para lo que tocas, gañán, te sobra con la que tienes". Pero luego me tiro ratos muertos viendo fotos del trasto.
¿Estoy pensando en cometer una tontería, o a los demás os suelen dar ventoleras de estas de vez en cuando?
Estoy hecho un lío.