Pues bueno compis, compuesto y sin novia me hallo.
Vengo de probar la que esperaba que se convirtiera en mi nueva 000, pero no.
Era la Lakewood M14 que hay a la venta aquí en el foro.
Decir que el forero Francisco Pérez, es encantador, simpático, amable y de palabra. Me ha dejado trastear lo que quisiera, a parte de en su Lakewood, en un par de Fenders viejunas que tiene, y sus amplis, y efectos, fabricados por él mismo. Pero...al grano. La guitarra me ha decepcionado bastante. No como mala guitarra ya en sí, si no por ser muy distinta a lo esperado, e increíblemente parecida en muchos aspectos a mi Art Dreadnought.
La bicha la tiene en estado 9 de 10. Apenas un par de marquitas superficiales en la tapa, pero sin mucha importancia, y ya está. Lo malo, es que la primera prueba de sonido, la cual ha sido tocando el, y yo escuchando a un metro por delante, me ha decepcionado al primer acorde. La guitarra no suena mal, simplemente suena, casi exacta a la mía. No me lo podía creer. Tenía miedo de encontrarme con un instrumento que no me satisfaciera lo suficiente como para desembolsar, siendo de segunda mano, casi el triple de lo que me costó la mía nueva. Pero es que, joder, es que la diferencia es ínfima.
Valoración: Estéticamente se me queda corta, para una guitarra que nueva supera los 1.500€. Muy sobria, sin inlays en el diapasón, y con un clavijero negro mate de aspecto rudo y tacto poco agradable.
En cuanto al tacto, decir que este señor la tiene encordada con 13's, y yo acostumbro a 12's. Aún así, dura de tocar no era. Pero tampoco mejora el tacto de muchas otras de menor gama que he probado. Le doy un 6 sobre 10, y por el beneficio del grosor de las cuerdas.
En cuanto al sonido, no se si por su tapa de cedro, o por su cuerpo un poco más profundo de lo habitual en su segmento, (Gran Auditorio es como la denomina la marca), pero me sonaba bastante parecida a la mía, con el, sobretodo, inconveniente de los agudos, que me sonaban algo más afilados aún que la mía, que es para mi gusto, uno de los peores aspectos de la Art.
En definitiva, ¿Mala guitarra? No. ¿La compraría? Sinceramente, no he probado todas las Lakewood, ni todas las del grupo Godin, pero sí una Seagull, dos o tres Simon & Patric, y media docena de Art & Lutherie, y afirmo con total seguridad, que por un tercio, o la mitad, según modelo, de lo que vale esta Lakewood, me voy de cabeza a por las Canadienses. Joder, ni me lo pienso. Por el precio de una, dos!.
Así que sigo con mi búsqueda. Joder... ya me veía esta noche acostándome a las tantas, con la sonrisa en los labios. Pero va a ser que no.
Ale, a seguir. Solo espero que no esté pidiendo demasiado a las gamas que estoy dispuesto a acceder según mi persupuesto. Soy consciente que el valor de los instrumentos aumenta exponencialmente a su calidad. No a la par. Pero en este caso, joder, es que es más del triple, por lo mesmo.
A ver que sale por ahí!
Por cierto, a quien se sienta aludido... La guitarra no fue comprada en Iberia, si no en Germania.