Hola a todos, por si alguien se estuviera preguntando qué tal va este bicharraco de Mooer, aquí van mis impresiones. Lo compré por eso de pillar algo digno que llevar a los ensayos y ahorrarme el peso de la pedalera grande. Lo probé en la tienda y hubo cosas que me convencieron y otras no tanto, aun así, lo que me pareció correcto hizo que finalmente lo comprara, aquí van mi opinión:
Lo bueno: Tanto el overdrive como la distorsión son analógicas y eso se nota. Se consiguen fácilmente ajustes con muy buen sonido, algo muy de agradecer cuando la base de tu sonido está en los drives. Tiene un boost que empuja el overdrive muy bien, tonos con mucha dinámica y buen sonido, muy usable. Si al overdrive le sumas la distorsión suena a gloria bendita para el bicho del que estamos tratando. Además, la distorsión tiene un switch para impulsar los medios bastante eficiente. En el capítulo de modulaciones, sin ser para tirar cohetes, cumple también con su función, un trémolo que si lo ajustas bien suena creíble, un chorus y un phaser completan el capítulo, si les dedicas un rato los puedes ajustar bastante bien. El delay suena también bastante convincente. Cosa buenas son el tamaño y peso, claro está, y que viene con un estuche estupendo.
Lo malo: La reverb, es un asquete, para comenzar baja el volumen general notoriamente, y el sonido no es nada del otro mundo, pero el principal inconveniente es lo primero que indico, empobrece y baja el volumen de manera clara, y por mucho que me he puesto a ajustar no he encontrado el desesado punto medio o de compromiso, así que no la uso. El afinador, una mierda pinchada en un palo, así de claro, tiene unos márgenes de imprecisión nunca vistos, jajajajaja, puedes confiar tanto en él como en una almohada con pinchos envenenados, absolutamente inútil. Por otra parte, cuando lo compras no viene con alimentador, aunque uno de 9 voltios con la polaridad más habitual iría bien.
En fin, que le daría un 7 sobre 10 al aparatejo este, dependiendo de para qué lo quieras puede ser una pequeña navaja suiza para llevar a ensayos e incluso a directos sin deslomarte por el peso.
Lo bueno: Tanto el overdrive como la distorsión son analógicas y eso se nota. Se consiguen fácilmente ajustes con muy buen sonido, algo muy de agradecer cuando la base de tu sonido está en los drives. Tiene un boost que empuja el overdrive muy bien, tonos con mucha dinámica y buen sonido, muy usable. Si al overdrive le sumas la distorsión suena a gloria bendita para el bicho del que estamos tratando. Además, la distorsión tiene un switch para impulsar los medios bastante eficiente. En el capítulo de modulaciones, sin ser para tirar cohetes, cumple también con su función, un trémolo que si lo ajustas bien suena creíble, un chorus y un phaser completan el capítulo, si les dedicas un rato los puedes ajustar bastante bien. El delay suena también bastante convincente. Cosa buenas son el tamaño y peso, claro está, y que viene con un estuche estupendo.
Lo malo: La reverb, es un asquete, para comenzar baja el volumen general notoriamente, y el sonido no es nada del otro mundo, pero el principal inconveniente es lo primero que indico, empobrece y baja el volumen de manera clara, y por mucho que me he puesto a ajustar no he encontrado el desesado punto medio o de compromiso, así que no la uso. El afinador, una mierda pinchada en un palo, así de claro, tiene unos márgenes de imprecisión nunca vistos, jajajajaja, puedes confiar tanto en él como en una almohada con pinchos envenenados, absolutamente inútil. Por otra parte, cuando lo compras no viene con alimentador, aunque uno de 9 voltios con la polaridad más habitual iría bien.
En fin, que le daría un 7 sobre 10 al aparatejo este, dependiendo de para qué lo quieras puede ser una pequeña navaja suiza para llevar a ensayos e incluso a directos sin deslomarte por el peso.
