#22 No hay duda de que la tecnología avanza a pasos agigantados y con dispositivos digitales se puede sonar muy bien, peeeero... también hay un componente romántico en todo esto. Si no fuera así, las grandes orquestas sinfónicas llevarían korgs y violines midi, y en lugar de un director habría una pantalla 4k con algún programa informático que daría instrucciones más precisas que las de un humano. Sin embargo siguen tocando con sus steinway y sus stradivarius.
Esto es lo mismo, el feeling que te da una guitarra viejuna cargada de historias, el crujir de unas válvulas, el hum de unas single coil o los conos de un 4x12 a punto de salirse de la caja no te lo dan los equipos digitales. Por eso muchos preferimos escuchar cierta música en un buen plato de vinilos con un ampli setentero que en un dvd con un home cinema. Que vale, ya sabemos que no es lo más práctico, pero nos gusta todo ese ritual que nos devuelve a otro tiempo en el que las cosas se hacían de otra manera. Quizás los más jóvenes no sienten esa nostalgia porque no han tenido esas vivencias, pero a mí me gusta toda la parafernalia que rodea a los equipos antiguos.
Esto es lo mismo, el feeling que te da una guitarra viejuna cargada de historias, el crujir de unas válvulas, el hum de unas single coil o los conos de un 4x12 a punto de salirse de la caja no te lo dan los equipos digitales. Por eso muchos preferimos escuchar cierta música en un buen plato de vinilos con un ampli setentero que en un dvd con un home cinema. Que vale, ya sabemos que no es lo más práctico, pero nos gusta todo ese ritual que nos devuelve a otro tiempo en el que las cosas se hacían de otra manera. Quizás los más jóvenes no sienten esa nostalgia porque no han tenido esas vivencias, pero a mí me gusta toda la parafernalia que rodea a los equipos antiguos.