Quería compartir una experiencia que he tenido y que me ha hecho pensar (duele, pero lo he conseguido). Ojo, no busco polémica, pero creo que es una reflexión que a unos pocos les puede resultar interesante.
En mi eterna búsqueda del tono perfecto, la guitarra perfecta, el ampli perfecto (sabéis perfectamente de qué hablo, y si no, qué afortunados sois...) me he preocupado de tener una guitarra cojonuda, que suene y se toque muy bien, un ampli cojonudo, de calidad, que suene maravillosamente, pero luego, en mi pedalera, entre guitarra y ampli, junto a pedales estupendos he metido pedales chinos baratos porque "son copias que suenan igual que el original". En mi caso, por ejemplo, llevaba un clon del Klon de Demon FX (23 euros en Aliexpress), y un Mosky Golden Horse (15 euros), porque ambos eran clones del Klon, eran estupendos, qué baratos, qué bien suenan, etc, etc. Youtube lleno de vídeos diciendo que son maravillosos. Como veis, me va el Klon Centaur.
Hace poquito, por un confluencia de recomendaciones, me pillé el Warm Audio centavo (USA, 180 euros). Lo puse en la pedalera junto a los otros dos para compararlos entre ellos, más que nada para ver si había hecho el canelo y los tres sonaban igual. Es decir, hice lo que hacen multitud de vídeos de Youtube, comparar pedales, pero lo hice yo, sin trampa ni cartón y sin que nadie me financie. Bueno, solo decir que me entró la risa floja. No es que no sonaran igual, es que los dos pedales chinos eran una mierda pinchada en un palo al lado del Centavo. Ni sonido, ni salida (los chinos tienes que triplicar el volumen para conseguir acercarse al Centavo), ni nada. Por primera vez entendí que, efectivamente, el Klon es un pedal transparente. Es que ni siquiera se parecían. Aparte la caja, que tonto de mí pensaba que la del Demon FX era similar al Klon original, cuando es como la mitad de tamaño (el Centavo sí es idéntica), pero bueno, eso ya es desconocimiento por mi parte, que nunca he visto uno original (al precio que están seguro que cobran entrada solo para verlo). Ahora el Mosky ha ido al armario, el Demon FX lo uso de booster (ganancia al cero, volumen muy alto, ahí se apaña bien porque no desvirtúa el sonido, como sí lo hace su overdrive), y el Centavo se ha hecho el jefe de la pedalera.
En fin, que he ganado en sonido, y mucho.
Y esa es mi tonta reflexión que quería compartir: invertimos en guitarrazas, amplis de la ostia, y luego somos muy felices con pedales de mierda. Y en los pedales hay que invertir también. Al igual que una guitarra de 200 euros no puede sonar y tocarse como una de 5000 (lo siento, orgulloso propietario de una de 200, pero esto es así) o un ampli de transistores de 150 euros no puede sonar como uno de válvulas de 2000, un pedal chino de 15 euros no va a sonar ni remotamente parecido a uno de 200. Seguro que muchos de vosotros ya sabíais esto de siempre, que yo soy muy lento y tiene cojones que tenga estas revelaciones a mi edad, pero por si acaso, ahí lo dejo.
Gracias por aguantar mi brasa.
Saludos, compañeros.