De historias de hostias tengo un libro lleno. Como dije hace unos post, a mi me encanta pegar carreras y saltos por el escenario, soy de esos que les gusta subirse al 4x12 o a la tarima del bateria para pegar saltos.... me dejo llevar y a veces me pasan malas pasadas. Os cuento dos hostias bastante epicas de los ultimos años.
Anecdota 1.
Tocabamos en un gaztetxe, en verano y al aire libre, pero ya sabemos que por el norte hasta en verano llueve, asi que el escenario tenia una especie de estructura de hierro sostenida sobre las patas en las esquinas del escenario, que soportaba un toldo mediante por tubos redondos de hierro bastante gordos. El suelo eran planchas de madera bastante viejecillas y mas que sostener solidamente, estaban como flexibles, con lo que alli se movia todo.
La bateria tenia una tarima como de 30 centimetros, y al lado, como el suelo era inestable, decidi montar las pantallas en configuracion de 4x12 y al lado, 2x12 y encima el cabezal.
Final del bolo, antes del bis. Con todo el subidon, doy dos pasos, me subo a la tarima de la bate y de ahi a la pantalla 4x12, llega el final del tema y pego un ultimo salto con todas mis fuerzas planeando aterrizar justo cuando acabe el break final de bateria.
Bueno. Esa era mi idea. Lo que no contaba es que justo a un palmo de mi cabeza, estaba uno de esos tubos gordos que sostenian el techo. Mi cabeza fue como una bola de pinball: golpeo a gran velocidad el tubo, frenando todo el impulso, para devolverlo en forma de rebote, con lo que todo yo sali disparado hacia el suelo, donde me quede sentado de culo delante de la pantalla en shock semi inconsciente unos 5-7 segundos: Todo borroso, luces de colores, ruido de gente, no tener ni puta idea ni quien soy ni que ostias hago ahi. Conmocion total.
Al cabo de unos segundos logre entender que estaba en un concierto y que acababamos de terminar... Mis colegas se dieron cuenta al darse la vuelta al terminar, pero la hostia solo la vio el publico y el baterista, que hasta se asusto.
Desde entonces, si hay techo cerca, prohibido venirse arriba.
Anecdota 2:
Año 2016. Festival bastante conocido en la zona de Gredos. Final del bolo, vuelo desde la tarima del bateria, con tan puta mala suerte que al aterrizar, desde las alturas, aterrizo en un cable, que rueda hacia atras, y por ende, yo salgo de cabeza como un puto misil hacia el borde del escenario, y justo en ese momento se cruza mi bajista, y me estrello contra el, rodamos los dos por el suelo, arranco el anclaje de la correa de la Les Paul de cuajo, se revienta el portapilas del inalambrico... y me quedo tirado encima de los monitores (de suerte no los tire abajo) sabiendo que si me mueven un milimetro, sera imposible tocar porque se saldran las pilas del inalambrico.
Aparece nuestro backliner a la carrera y me levanta "¡¡¡arriba, arriba!!!!" y yo gritando "no no, no jodas, no me muevas!" y el "que si!" y nada, me levantó de un tiron y fin de la funcion, todas las pilas tiradas por el escenario y la guitarra sin correa. Menos mal que era el ultimo tema del bolo.
De tan bien como quedó, parecía una coreografia organizada, y la realidad es que a poco y nos matamos.
De aquella nos quedo una foto para el recuerdo, justo del momento tirados por los monitores. Que grandes momentos... que hostias...