bassalbert escribió:
está claro que es falta de voluntad porque poderse hacer, se puede.
este año compré unas entradas para el National Theatre de Londres para una obra de teatro. l
Efectivamente, quienes quieren hacerlo, tienen sistemas anti-reventa.
Sin salir de Londres, tanto el Barbican Centre (donde he visto a Lucinda Williams, o un Festival de jazz), como el teatro shakespeariano The Globe, o la Royal Opera, tienen diferentes sistemas, o bien te mandan la entrada el día antes al correo, o te hacen registrarte como individuo, o lo que sea, pero son sistemas que, aunque a priori suponen un poco más de engorro en la compra, enseguida te das cuenta de que impiden que las casas de reventa pillen cientos o miles de entradas y luego disparen los precios por su cuenta.
Diversos teatros de ópera destacados en otras ciudades europeas han ido acoplándose a ese mismo sistema, y en España, Madrid o Barcelona venden sus entradas de ópera directamente por los teatros, con lo cual los precios no se incrementan o, como mucho, una pequeña tasa de gestión, pero no esas locuras desorbitadas.
Otra cosa es que Ticketmaster y algún otro distribuidor andan ya tan interconectados con LiveNation y similares, que son casi lo mismo, generan las entradas, las venden y las revenden, y luego están ya los chorizos supremos de Viagogo.
Este verano, en los conciertos de Dylan en Madrid, fui probando las entradas que quedaban libres, y cada vez que marcaba una que aparecía como libre, me saltaba un letrerito de que ya no estaba disponible.
El mismo día ya aparecían a precios abusivos en plataformas de reventa. Pues nada, quien quiera pagar la reventa, que lo vea.