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Jeje, aunque fue improvisada, en el fondo es una prueba muy "deliberada", porque iba buscando exactamente eso.
Me encantan esas guitarras (esta no es la única que me loda, es algo que busco casi sistemáticamente, en la mayor parte de las que tengo o he tenido) en las que puedes tocar una nota relativalente aguda, dejar que la madera la devuelva y la sostenga, muear la cuerda y tocar una o dos notas más en esa misma cuerda y dejar sonando todo el acorde en agudos ahí... y entonces acomapañarlo con una suave pulsación de una nota grave para ampliar el rango del acorde.
Esta guitarra no sólo hace eso, en un momento dado, con una sola pulsación de la primera cuerda me permite sacar 5 notas consecutivas digitando con la izquierda, sin tener que volver a pulsar con la derecha. Esto, que es más fácil que te lo dé una guitarra en los graves, no te lo dan tantas, de forma clara, con los agudos.
Todo es dedo, desde luego, nada de púa (que yo recuerde, nunca he usado púa con esa guitarra, y cumplirá un año en casa el mes que viene), y bastantes de las pulsaciones son de pulgar, que en teoría brillan menos que si tiras de uña (aunque para mi gusto suenan más "redondas"), aunque ahí alterno según toque en cada momento. Siempre me gustó el uso que hacían algunos guitarristas de su pulgar... Wes, Jeff Beck... desde mi posición terrenal miro para arriba a esas luminarias y trato de coger algunas de las aportaciones que han hecho... para usarlas hasta donde me alcanza mi pobreza técnica.
La verdad es que medité un poco "de cabeza" cómo entrarle a la prueba antes de tocarla, y me gustó el resultado cuando escuché la grabación, me pareció muy demostrativo de lo que buscaba, así que lo colgué, como habíamos estado comentando este tipo de modelos de Lowden, me pareció que ampliaba el horizonte de lo comentado y lo ilustraba bastante.
Sobre la sencillez y la cosa de "lucirse" tocando... con los años, cada vez me interesa menos el número de notas que suenan y más el que conjuguen de manera que me agrade, y sobre todo el poder escucharlas con tiempo para disfrutar cada una de ellas. Tanto en lo que escucho como en lo que toco.
Creo que muchos de los músicos "más rápidos de este lado del Mississippi" han evolucionado en sus carreras de ese modo. en la juventud todo es espuma, velocidad que pide el cuerpo... y con la madurez viene el reposo, las ideas por encima de la velocidad, y la belleza más contemplativa. Igual son fases de la vida, no digo que una sea mejor que la otra, cada momento hay que disfrutarlo como te parezca mejor.
un ejemplo de esa evolución puede ser uno de los más destacados "rápidos", el gran McLaughlin, nada que ver sus recorridos vertiginosos del mástil en sus grabaciones con la Mahavishnu, o los trios con Paco y Coryell o DiMeola, con el abordaje que hace de su disco homenaje a bill evans, "Time remembered", sin duda mi disco favorito, de largo, de este guitarrista.
https://www.youtube.com/watch?v=N6zOkj5cQfs