Tres guitarras y media (22 cuerdas)

Antes de empezar con el relato de la construcción de este instrumento, es de ley que yo agradezca a Juan Ramírez (Luthier de Las Palmas de Gran Canaria) su inestimable ayuda, la orientación y el seguimiento que me ha ofrecido en este proyecto.

He partido de un plano mediocre, pues contaba con algún error y tan solo ocupaba un folio, pero con mayor o menor fortuna fui capaz de traspasar las medidas a la maderas.

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Corte cuidadoso pues aunque parezca una simpleza no hay ni un sólo ángulo de 90 grados en todo el montaje, con la complicación que ello supone a la hora de hacer el encaje de las piezas.

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El encolado es simple, pero al fondo teneis una de las piezas mas complicadas: la base superior. pues al no tener tampoco ni una cara paralela a la otra, y aparecer en el plano en representación diédrica, los angulos no son los que debemos calcular, pues nos lo presentan de perfil pero la fuga no es perpendicular, con lo cual no podemos calcular el angulo real al que ajustar la sierra, pues lo que representan es su proyección no longitudinal a la linea de corte.

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El diseño y encolado de la tapa posterior conforma lo que en el instrumento se llama "cóncavo" (al principio yo le llamaba el ataúd) jejeje.

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El mastil se corta a partir de una plantilla confeccionada en rechapado fenólico. Esta pieza debe soportar la mas de una tonelada de tensión que ejercerán las 22 cuerdas, por lo que no se recomienda hacerla de una sola pieza de madera, sino de varias con la fibra cruzada (contraveteada)

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Otra operación que requiere cierta destreza es el ajuste del mástil con el pilar, pues cualquier error en el asiento de estas piezas dará al traste con el instrumento.

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La tapa armónica cerrará el cóncavo. Está construida igual que en las guitarras con abeto o cedro, pero como imaginareis con un grueso bastante superior.

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El mástil, se refuerza en la unión de la base superior del cóncavo por medio de una pieza cuyo nombre es "shoulder" y no conozco traducción.

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En otro tipo de construcción, la tapa armónica suele llevar espinetas, pero en este caso, lo que llevará será dos puentes de cedro. Uno en el interior y otro exterior. Hay que hacer ajuste, pues para variar tampoco tiene ninguna cara paralela, sino que en un extremo tienen siete milimetros y en el otro cuatro. Si en lugar de usar tapa maciza usamos una tapa de rechapado aeronáutico, podremos prescindir de uno de los puentes y hacerlo del mismo grosor en toda su extensión.

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Como es lógico, el puente interior deberá ir encastrado en la base superior e inferior del cóncavo sin dejar ningún resquicio que pueda dar ruidos o vibraciones raras.

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Con el encolado de la tapa armónica al cóncavo, tenemos terminado el volumen del cuerpo y listo para el lijado.

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Por comodidad, antes de encolar el puente exterior le practicamos los agujeros por los que pasarán las cuerdas, posteriormente traspasaremos la tapa y el puente interior con una broca de menor tamaño.

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Ya queda bastante poco para ir terminando el instrumento. De hecho ya podemos empezar con el tintado de las otras piezas.

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Como barniz (y haciendo un experimento) he probado el barniz al agua. Sabía que corría un riesgo pues sé lo que ocurre cuando acercamos agua a la madera: levanta repelo.
Este barniz prácticamente no se puede lijar, así que o lo das con pistola o te conformas con un acabado "rústico".

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Yo barnicé con brocha pero me abstuve de dar barniz al agua a la tapa armónica, pues habría sido la ruina, así que eché mano de mi añorada nitrocelulosa y di tan solo dos capitas diluidas para la protección de la madera.

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Una vez seco y taladrado el puente, se refuerzan los agujeros pasacuerdas con unos ojales (el interior de un diámetro menor)

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Los ojales exteriores son de mayor diámetro pues hacen las veces de las selletas de la guitarra, así que la cuerda debe apoyar pero tener solo un punto de contacto con el ojal.

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Ya quedan pocas operaciones para poder terminar nuestro instrumento, pues queda montar la mecánica. Acondicionamos los agujeros para recibirla, y como no, el diámetro se efectúa según standar británico (god save the quee) y hay que procurarse brocas de esta métrica.

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Pero con paciencia y cuidado vamos instalando los levels y pines que nos servirán para poder afinar nuestro instrumento

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El montaje es curioso, pues no va encolado, ni atornillado, ni nada por el estilo, tan solo hay que añadir una base al cóncavo, encastrar todo en su sitio y ya tenemos nuestras tres guitarras y media listas para el encordado:

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:yahoo: