Me gusta que lo veas como un atajo, realmente lo es. Ahora el límite lo pone la creatividad de cada uno, porque, una vez conocida la secuencia de notas de cada escala, que es lo fácil, hay que hacerlas sonar bien, y cada usuario tendrá que explorar cada melodía para encontrar los ritmos que le sugieran. Es un sistema, si me permitís el adjetivo, más limpio que aprender las escalas con un patrón rítmico orientativo, ya que, sin la influencia de otros autores, es uno mismo el que va descubriendo las posibilidades de cada recorrido, y, en mi opinión, así encontraremos melodías que nacen de la propia imaginación, más originales.
O a la inversa, si un aficionado sabe qué escala suena en un tema musical que quiera aprender, con esta guía le será muy fácil aprender a seguirla.