Yo me he vacunado.
No creo que a mi edad los efectos secundarios sean demasiado importantes.
Pero lo he hecho con una vacuna con muy pocas garantías. De hecho, no están dando el porcentaje de los hospitalizados vacunados. Si han dicho la media de edad, alrededor de los 50. Lo cuál quiere decir que muchos de ellos, vacunados. Es decir, la vacuna no es la panacea que nos han vendido. Por eso mucha gente formada, con criterios y con conocimientos se piensa muy bien si se la pone o no a sus hijos. Una vacuna para una enfermedad en la que los grupos de riesgo están vacunados mayoritariamente, y que a ellos no les afecta apenas. Utilidad baja, vamos. En sociedades menos aborregadas que la nuestra y con una opinión pública menos servil, está habiendo muchas protestas. De hecho, en muchas partes de Europa, a las que no vamos a darles lecciones de demócratas. Y no se muere la gente por la calle como si fuera la peste negra. O sea, que como mínimo, el derecho a la duda, lo tienes.
La contraposición del derecho o no a vacunarte con la salud pública que estáis esgrimiendo es inadecuada, porque parece que coges la enfermedad y te mueres automáticamente. Fuera de la gente muy mayor, la tasa de mortalidad de la enfermedad es muy baja. He conocido casos graves en gente por debajo de 70, pero la inmensa mayoría de los que he sabido han sido prácticamente inocuos. Y de los mayores, muchos de ellos murieron en las primeras fases, con mil muertos diarios. Y no van a levantarse de la tumba por mucha vacuna que haya. Eso se acabó, y no es probable que vuelva a pasar. En este momento, con tasas de contagio similares en algunas regiones, hay muchos menos muertos. Así que algunas de las ideas que esbozáis me parecen claramente exageradas.
Estoy convencido de que si a una parte de los vacunados les llegan a decir que, tras la vacuna, seguirían las restricciones, se lo hubieran pensado más.
Se está aprovechando el tema de las oleadas y las versiones y variaciones para meternos miedo de forma continua, y poder hacer recortes de derechos que no se harían de otra forma, y para tapar la incapacidad de nuestros dirigentes políticos. Entre otras cosas, nos suspendieron de forma ilegal el derecho de movilidad durante tres meses. Esto, con sentencia firme del TC.
Aparte de la tontería de llevar mascarilla en lugares abiertos, como en mitad del monte, hasta hace cuatro días. Algo que no se hacía en países de nuestro entorno, con menos casos y menos muertos. O que la gente no pudiera ir a regar las huertas durante el encierro. O el cierre brutal de la hostelería, que sabemos que no fué lo más efectivo, ni mucho menos. Esas medidas han sido claramente contraproducentes en cuanto al ánimo del personal, y han hartado a muchos. Ahora, vacunados, diles que se corten.....
La distancia de seguridad habría que guardarla con vacunas y sin vacunas. En un concierto al aire libre, con esa distancia, la probabilidad de contagio sería mínima. Y el hecho de estar vacunado no evita que contagies a otros, como sabéis, así que parece un poco inútil exigir tanto en poblaciones que están más o menos controladas. Que exijan las distancias adecuadas, que avisen de que se va a permitir la entrada a no vacunados, y el que no quiera, que no vaya. O las pruebas, que eso parece más efectivo. Lo de la vacuna, en este caso, me parece un chantaje bastante indecente.
También estoy de acuerdo en que hay una responsabilidad individual con la que cumplir. Yo soy responsable de no cometer conductas de riesgo que pongan en peligro la salud de otros. Pero de su miedo, no soy responsable. Ni tengo porqué sufrirlo. Y se ve bastante incumplimiento, pero se ve mucho más miedo irracional.
8