Me gustaría saber vuestro punto de vista sobre una cuestión que siempre me ha llevado un poco de cabeza, tanto siendo guitarrista y tocando, como asistiendo a un concierto.
Cuando aún tocaba en directo, en los grupos siempre había (y supongo que hay) dos bandos en los guitarras : los que querían tocar el solo de un tema exactamente igual a cómo lo había grabado, y el que quería improvisar o hacer variaciones del mismo.
Personalmente siempre he estado en el bando de los que tocan el solo tal y como lo han grabado (hablo de composiciones propias).
¿Por qué? Pues simplemente porque cuando voy a un concierto a ver mi grupo favorito lo que espero es escuchar ESE solo que me sé de memoria por haber escuchado quinientas veces el tema, con todas las notas, bendings y trémolos en su sitio. Si en ese momento el guitarrista empieza a desvariar e improvisar, aunque sea un solo magnífico me provoca una especie de coitus interruptus y maldigo el día en que nació el pobre hombre (o mujer) por muy virtuoso que sea. No puedo remediarlo, es más fuerte que yo. Y me frustro un montón 😡
Comprendo perfectamente que en un directo se alargue una intro, que se corte un tema para interactuar con el público, que la banda se vaya por los cerros de Úbeda...siempre que luego se vuelva a la estructura principal y se toque el maldito solo IGUAL que en la grabación. Eso sin tener en cuenta que las “idas de olla” están o deberían estar perfectamente ensayadas de antemano, obviamente.
Y luego está el otro bando. Los que defienden que en directo hay que dar lo que se siente en ese momento, que si estás en una nube y el público responde tienes que tocar desde el estómago, dejándote llevar.
Y esos dos bandos parece que son irreconciliables. A los que piensan como yo nos acusan de fríos, de cortar el rollo. Y nosotros respondemos que la creatividad está en el momento de la composición, que puedes dejarte llevar en directo hasta un cierto punto, pero que cambiar un solo es como variar un estribillo, hay límites. El solo está compuesto para encajar en la línea melódica y con una intencionalidad concreta, y debes respetarlo. Aparte de que el público mayoritariamente quiere escuchar en directo lo mismo que ha escuchado en el disco.
Vamos a ver, si en un tema no se cambia el riff de entrada, o el break de batería antes de entrar al estribillo, o la guitarra rítmica, ¿por qué c*j*n*s se cambia el solo?
Hablamos de rock/pop, claro. En territorio jazz o blues lo que mola es la improvisación, obviamente.
¿Cómo lo veis vosotros? ¿Si o no?