Bueno, vamos a ver qué sale...
Como notas previas, debo advertir de lo siguiente:
- No he probado muchas guitarras en mi vida, con lo que la única comparativa más o menos fiable que puedo hacer es con mi Yamaha de 300 euros...
- La guitarra no está en su configuración original, ya que lleva pastillas Lundgren "Heaven 57" (PAF) en el mástil y "The One" (mayor ganancia y nivelde salida) en el puente, así como sistema "coil split" incorporado. Las PAF MK2 estarán ya puestas en la Yamaha (todavía no he podido ir a por ella).
* Bueno, sobre la estética, ya se sabe: "para gustos están los colores"... A mí me parece una preciosidad (como el 99% de modelos tipo PRS) y el color es bastante original o inusual. Tengo que decir que es difícil plasmarlo con exactitud en las fotos, ya que el cuerpo es tan reflectante que muda de tono en función de lo que le rodee y de la iluminación que se tenga (al mandarme las primeras fotos el luthier, me llevé un susto importante, ya que aparecía azul...). Después de tirar bastantes fotos, creo que he podido captar más o menos el color real (aún así, el revés del mástil aparece como morado, cuando es negro).
Creí que perdería algo de "clase" al ponerle unas pastillas negras descubiertas, ya que las PAF originales vienen en blanco y negro, y al final renuncié a las tapas de níquel por posible incidencia en el sonido. Pero qué va, para nada. El marco blanco marfil que rodea a las pastillas ya le da un realce suficiente, y en conjunto queda un aspecto sobrio y solemne que me encanta. También me ha gustado mucho la pala del clavijero, muy "coqueta" ella (aunque la inscripción creo que queda mejor en algunos modelos tipo Les Paul donde va en sentido transversal, y no apaisado como aquí). Las letras, aunque no se aprecie aquí, tienen cierto reflejo nacarado.
Por lo demás, creo que no hay nada demasiado sorprendente, siguiendo la línea PRS.
En cuanto a su construcción (aunque no sea estrictamente estética, lo pongo aquí), yo no soy ningún entendido. Es hecha en Japón y tienen un precio ya considerable, con lo que no dudo de su calidad. El luthier me comentó que le habían sorprendido las calidades y los acabados, con lo que he de confiar en él, teniendo en cuenta que al menos tiene unos cinco modelos de Tokai tipo Les Paul en su tienda-taller (tanto de China como de Japón). Aunque creo que el acabado es más una cuestión de superficies, relieves y pulidos, sí he de decir que si te fijas bastante se puede notar cómo en algunas partes de la franja color madera clara que rodea el cuerpo se puede apreciar que alguna mota de pintura oscura ha "invadido" esa franja. No le doy mucha importancia, y ya digo que creo que no es una cuestión de acabados.
Me gustan mucho los rebajes que lleva en la parte superior trasera y en el "cutaway", que me imagino también que serán bastante calcados a los de una PRS.
No la he pesado, pero me dijeron que rondaba los 4 kgs. Para lo que yo estoy acostumbrado, pesa, pero no es nada traumático, la verdad (para cualquiera con una Les Paul le parecerá normal e incluso tal vez tirando a ligera.
* Entrando ya en prestaciones , sonido y comodidad de ejecución, os cuento mis impresiones:
A grandes rasgos, lo que puedo decir con seguridad es que he ganado en "autenticidad" de sonido (tened en cuenta que la comparo con una guitarra que aunque me ha dado muy buen resultado hasta ahora, se puede decir que es de gama baja...), en versatilidad y en definición. El timbre y el brillo de la pastilla del puente en modo simple es sencillamente una maravilla, sintiendo perfectamente el contacto cuerda-púa. Es un placer poder sonar a The Shadows, jejeje, y me he dado cuenta, a raíz de esto, de que lo que sucede es que jamás había tenido una pastilla simple en el puente. Mención de honor también para la combinación de pastillas puente y mástil en limpio y en modo simple.
De ahí a subir la ganancia a tope y usar la pastilla "The One" del puente (modo "humbucker") hay todo un mundo de posibilidades entre lo clásico y cierta caña que roza (cuando no es directamente) el heavy metal.
Todavía me falta por explorar algunas cosas (pastillas en modo simple a media ganancia, etc.), pero, en general, mi impresión es muy buena. Me parece que al fin sueno "de verdad", tengo más agresividad que antes si quiero, y más suavidad también. La definición es mucho mayor que la que tenía (por no decir que es perfecta); hay canciones en que antes no se distinguía lo que hacía y ahora... sí.
En cuanto a comodidad, todavía no puedo asegurar que haya mejorado, pero desde luego no he ido a peor. Acostumbrado a otra guitarra, siempre hay cosas que chocan, pero el caso es que he tocado tres días y ya me siento muy compenetrado. El mástil quizá es un pelín más grueso que el de mi Yamaha, pero desliza fenomenal y el contorno me gusta más. Creo -igual no estoy en lo cierto- que está en una línea de silueta ligeramente menos saliente que la de una tipo Les Paul.
Hay algo que me extraña y sobre la que espero estar equivocado, pero el segundo día que la toqué me dio la impresión de que tal vez tiene un poquitín menos de "sustain" que mi Yamaha, cosa que no me cuadra, ya que doy por hecho que la madera ha de ser mejor y aquí el cuerpo es encolado, mientras que en la Yamaha es atornillado. No lo sé, pero le comentaré al luthier cuando vaya a recoger la Yamaha.
Las cuerdas se estiran bien, pero hecho en falta una "miaja" más. Tal vez tenga que ver en ello el hecho de que me han puesto cuerdas del calibre 10 (al parecer ya es de lo que más usa la gente, pero yo siempre he llevado calibre 9). Si alguien ha tenido la misma sensación al cambiar de calibre 9 a 10, que me diga. De todas formas, en el próximo cambio de cuerdas le pondré calibre 9 para salir de dudas.
En definitiva, lo que buscaba lo he conseguido al mejorar la calidad y claridad del sonido, así como la variedad. En cuanto a comodidad, me doy por satisfecho, ya que no me ha costado prácticamente nada hacerme a ella. En lo que hace a "bendings" y "sustain" -que no están mal en ningún caso, ojo- analizaré con más detenimiento y comentaré con el "luthier" a ver qué opina o me recomienda.
PROS:
- Variedad, calidad y definición de sonido.
- Manejabilidad.
- Un aspecto espléndido con cierta originalidad y solemnidad.
- ¡Aún me queda por probar otra guitarra!, jejeje
CONTRAS:
- Punto negativo para Tokai por no vender este modelo con el estuche incorporado.
- Para mí no es una gran contra, pero hay gente que tiene que saber que los potenciómetros japoneses siguen otro sistema distinto al de occidente (lineal-logarítmico; no entiendo nada, pero son los términos técnicos...). En el volumen se nota que con subir un tercio del indicador ya casi has alcanzado el máximo, cosa que hasta puede ser mejor para facilitar modulaciones. Pero como el del tono me lo han alterado para ponerme el "split coil", y han colocado un modelo europeo, resulta que sólo tengo tono grave en el extremo de la rueda. Ya digo que para mí no es problema, pero puede haber gente para la que sí.
- Aunque estoy encantado con la adquisición, soy consciente de que tal vez podía haber logrado algo muy parecido por menos dinero. La guitarra son 1.275 euros (unos 1.500 dólares) y las pastillas 305 euros. En total, 1.580 euros (¡sin estuche!). Un resultado estupendo, pero no sé si con la mejor relación calidad/precio.
- Por último, he de decir que al pasar de modo simple a doble se nota demasiada alteración del volumen. Supongo que será un problema generalizado en las guitarras que llevan este invento, pero a lo mejor me agencio un pedal de volumen o lo que el luthier me pueda recomendar para remediarlo en la medida de lo posible (se aceptan sugerencias, cómo no).
Espero haberos servido de alguna ayuda, como vosotros a mí.
Saludos.
